Líderes de organizaciones sin fines de lucro reflexionan y ofrecen consejos a periodistas para lograr una mejor cobertura mediática en el marco del Diálogo: el tercer sector como generador de noticias. Por Ana Teresa Toro :: Oenegé El evento se transmitió de manera virtual y contó con la asistencia presencial de estudiantes del Buró de noticias de la ASPPRO, de periodistas y de líderes del tercer sector. El lenguaje no sólo comunica, construye y transforma realidades. Es por ello que resulta importantísimo su uso adecuado y preciso a la hora de narrar las historias que afectan las vidas de la ciudadanía, particularmente, de aquellas personas que se encuentran en situaciones de vida de mayor vulnerabilidad. Comunicar es fundamental para movilizar ayuda, para provocar presión donde puede tomarse acción y, sobre todo, para crear conciencia en la opinión pública en torno a los problemas que nos aquejan como sociedad y los verdaderos significados que hay tras las múltiples formas de violencia. Por ello, desde sus inicios, los líderes del tercer sector han batallado para explicar las implicaciones del lenguaje que se utiliza para narrar las historias de las comunidades a las que sirven. La más reciente reflexión colectiva en torno a este tema ocurrió en el marco del Diálogo: el tercer sector como generador de noticias que se llevó a cabo el pasado viernes 4 de agosto de 2023. El evento cerró las actividades educativas de la Semana de la Prensa de la Asociación de Periodistas de Puerto Rico (ASPPRO) y contó con la asistencia presencial de periodistas, estudiantes del Buró de noticias de la ASPPRO y representación diversa de las organizaciones sin fines de lucro en el país. El diálogo fue transmitido de manera virtual para un público general a través de las redes sociales de la ASPPRO —donde se encuentra actualmente— y pronto podrás accesarlo a través del canal de YouTube de la Fundación Ángel Ramos. El panel estuvo compuesto por Rafelli González, director de la multiplataforma digital del periódico El Vocero; Ana Yris Guzmán, cofundadora y presidenta ejecutiva de Nuestra Escuela; Marcos Santana Andújar, fundador y presidente de la Red por los Derechos de la Niñez y la Juventud en Puerto Rico; y Marianne Ramírez Aponte, directora ejecutiva del Museo de Arte Contemporáneo. La presidenta de la ASPPRO Damaris Suárez ofreció un saludo formal a los presentes y destacó la importancia de esta conversación para el ejercicio del periodismo. Tatiana Pérez Rivera, periodista de Oenegé, fungió como moderadora del encuentro que marca el segundo año consecutivo en que la Fundación Ángel Ramos se integra al componente educativo de la Semana de la Prensa. El cuerpo del diálogo se reseña en la nota que acompaña esta publicación, pero desde Oenegé, hemos querido destacar una serie de consejos prácticos que los panelistas compartieron ante preguntas específicas del estudiantado y del público. A continuación, algunos de los más destacados: Si bien algunas organizaciones sin fines de lucro cuentan con la capacidad de pagar por sus gestiones de medios, se hizo un llamado formal a las fundaciones que las apoyan, a que les asistan de manera más directa en la inversión que requiere el manejo de las comunicaciones. El manejo del lenguaje en la cobertura mediática fue uno de los focos principales del diálogo. Para una organización sin fines de lucro las redes sociales son indispensables, tanto para dar a conocer sus servicios como para gestiones de abogacía a todos los niveles. Ese trabajo mano a mano, de repartir hojas sueltas en bicicletas, de publicar en las redes sociales que más utilizan las comunidades a las que sirven y las instituciones que pueden apoyarles, es vital y muchas veces sucede previo a la intervención de la prensa. “Los vecinos taguean al alcalde o al senador, se integran a sus causas”, puntualizaron. Proyectos como la Unidad audiovisual La 18 del Museo de Arte Contempoáneo que documenta su quehacer y lo transmite a través de distintas plataformas requieren de todo el apoyo que se les pueda ofrecer. Tanto en términos de inversión, como de masificar a través de medios más amplios el material que allí se gesta. Es importantísimo el no difundir el nombre, ni la ubicación de refugios para víctimas de violencia. Igualmente sucede con la protección de la identidad de las personas que han sido victimizadas, así como de los detalles específicos que puedan revelar su identidad. Una falla en este aspecto puede incidir directamente en la seguridad de las personas. En términos del uso del lenguaje una muy dura noticia reciente ilustra claramente su relevancia. “Leí un titular que decía que una niña de 13 años había sido llevada al hospital por su pareja. Sabemos que estas cosas se hacen con prisa pero una niña de 13 años no tiene pareja, tiene un agresor, o fue acompañada de su abusador”, explicó Santana Andújar. Su ejemplo sirvió para demostrar el modo en que el uso del lenguaje altera radicalmente una narrativa y puede tener consecuencias en la opinión pública. Igualmente, recomiendan que en muchos casos no es relevante a la noticia el informar si la situación de violencia ocurrió en un residencial público o en una urbanización de acceso controlado. Esto, por entender que este tipo de especificidad puede ponerse al servicio de la reproducción de estereotipos negativos contra comunidades marginadas y empobrecidas. El uso de la palabra menor tampoco es recomendado. Ya que, si bien describe el hecho de que un niño es ante la ley menor de edad, la connotación en el imaginario social alude —a juicio de los panelistas— a que se es menos: menos persona, menos ciudadano, menos en general. Se invita a repensar el término y utilizar niñez o niños y niñas. Algo similar sucede con el término desertor escolar, tan combatido por el equipo de trabajo de Nuestra Escuela, así como el de otras escuelas alternativas. La lógica tras esta recomendación tiene que ver con una descripción de la realidad más acertada y en la que se reparten mejor las responsabilidades sociales. Simplemente, hay jóvenes que abandonan la escuela porque la escuela ya les había abandonado también o por todo un entramado de causas sociales que van más allá del carácter en formación de un niño, niña o adolescente. Finalmente, se recordó que el Departamento de la Familia lanzó un adiestramiento para la cobertura de estos temas, cuyos materiales educativos están disponibles a través de la página web de la agencia.
Como parte de las actividades educativas de la Semana de la Prensa, organizada por la ASPPRO, se llevará a cabo el diálogo “El tercer sector como generador de noticias” Por Ana Teresa Toro :: OenegéNo basta documentar. Hay que difundir, exponer y expandir el alcance de la información que es relevante para la ciudadanía en su toma de decisiones. Esta perspectiva es intrínseca al periodismo y a los y las periodistas que, durante esta semana en Puerto Rico, celebran la Semana de la Prensa. Se trata de una oportunidad anual para analizar los retos contemporáneos del oficio y repasar valores como la ética, la necesidad de rigor investigativo y el papel de la prensa en toda democracia. Resulta igualmente importante observar y reflexionar en torno a los temas que, por distintos factores, se vuelven protagónicos en la conversación de país. En los últimos años esto ha ocurrido con el tercer sector. No porque antes no ocupara una voz fundamental en la toma de decisiones y sobre todo en la articulación y ejecución de soluciones efectivas, sino porque debido a las múltiples crisis que el país ha atravesado en los últimos años, su papel se ha tornado aún más relevante. Esta realidad incide en la cobertura mediática que pone su foco en el sector y es precisamente esa conversación viva la materia prima del diálogo “El tercer sector como generador de noticias”, que se llevará a cabo este viernes, 4 de agosto a la 1:00 p.m. de manera virtual. El evento forma parte de las actividades educativas de la Semana de la Prensa que organiza la Asociación de Periodistas de Puerto Rico (ASPPRO). El diálogo será transmitido a través de las redes sociales de la ASPPRO y de la Fundación Ángel Ramos. El panel estará compuesto por Rafelli González, director multiplataformas de El Vocero; Ana Yris Guzmán, directora ejecutiva de Nuestra Escuela; Marcos Santana, director ejecutivo de la Red por los Derechos de la Niñez y la Juventud de Puerto Rico y Marianne Ramírez, directora ejecutiva del Museo de Arte Contemporáneo. La periodista de Oenegé Tatiana Pérez Rivera será la moderadora. Temas como el impacto de la educación alternativa y la difusión de la labor en la educación del país, así como los cambios en legislación que afectan al sector y sobre todo a quienes reciben sus servicios serán parte de la conversación. Igualmente, se abordará el sentido de comunidad que se gesta desde las organizaciones y su importancia ante emergencias o situaciones extremas. Todo esto, en el contexto del espacio que ocupa el sector en la conversación de país desde los medios de comunicación. “Por segundo año consecutivo apoyamos a la Asociación de Periodistas de Puerto Rico en estos diálogos. El año pasado el foco fue la figura de nuestro fundador Ángel Ramos y en esta ocasión damos un salto al presente integrándonos a la extraordinaria agenda educativa de la Semana de la Prensa. Estoy segura que de este encuentro saldrán, no sólo importantes reflexiones e ideas, sino que podremos escuchar de manera concreta el modo tan contundente en que el tercer sector transforma el país y el gran valor que tiene la amplia difusión de su quehacer”, destacó la directora ejecutiva de la Fundación Ángel Ramos, Laura López.
La Red por los Derechos de los Niños y Jóvenes de Puerto Rico fortaleció su estructura operativa y maximizó sus servicios gracias a sus fieles voluntarios. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé Grupo de empleados de Banco Popular de Puerto Rico rehabilita residencia que la Red por los Derechos de la Niñez y la Juventud en Puerto Rico utilizará para asistir a sus participantes. Foto / Suministrada “Cuando pasó el huracán María, no éramos la organización que somos ahora”, acepta Marcos Santana Andújar, fundador y presidente de la Red por los Derechos de los Niños y Jóvenes de Puerto Rico, activa en 32 municipios del país. No sólo se refiere al número de empleados, sino también a la diversificación de servicios y al fortalecimiento de su estructura que experimentó la organización sin fines de lucro fundada en el 2013, con miras a adelantar el cambio sistémico para erradicar la violencia al agrupar albergues, activistas individuales y voluntarios. El denominador común para lograrlo han sido sus voluntarios. “Gran parte de nuestra respuesta a la emergencia la logramos con la labor de nuestros voluntarios y voluntarias, así empezamos la recuperación de los albergues. Esa primera etapa fue directamente con manos voluntarias porque nosotros éramos muy pocos. Ese llamado a la acción a la gente, posterior al huracán María, fue bien poderoso porque muchos de nosotros —que pasamos el huracán en albergues— estábamos agotados. Se hizo un llamado por los medios de comunicación disponibles, pero lo más que funcionó fue el boca a boca y mucha gente empezó a registrarse como voluntaria”, explica. Santana rememora que los primeros voluntarios fueron organizados en la sede de la Fundación Banco Popular en Hato Rey, para realizar tareas de entrega de suministros. “Después empezamos a entender la importancia del voluntario más especializado, conseguimos gente que nos ayudaba identificar fondos en la diáspora, a escribir solicitudes de fondos de emergencia, a articular un mensaje; gente que nos conectó con periodistas de afuera, todo eso se hizo con recursos voluntarios. De hecho, muchos de nosotros no cobrábamos porque la Red tenía muy pocos recursos económicos así que teníamos trabajos en albergues”, señala Santana. Ese proceso de recuperación exitoso fue documentado en la “Guía para la Protección de los Derechos de los Niños en Desastres Naturales”, la cual fue lanzada libre de costo en el 2018 y actualizada en el 2020 tras la pandemia por COVID-19. Astrid Morales, consultora y gestora de Ciudadanía Activa de la Fundación Ángel Ramos (FAR), observa que el contexto que ofreció el huracán María a la Red, “fue la pieza catalítica para el crecimiento y el desarrollo exponencial que tuvo esa organización”. “Eran bien poquitos empleados y las necesidades de los albergues de menores eran tantas, que la única manera de atenderlas era convocando voluntarios. Ese voluntariado le dio visibilidad a la organización y lo pudieron capitalizar excelentemente bien en los medios de comunicación. No solamente permitió la continuidad de sus trabajos de recuperación, sino que además generó oportunidades de desarrollo, de alianzas, de donaciones. Gracias a esa mano voluntaria pudieron ampliar el trabajo y visibilizarlo”, destaca Morales. LA NUEVA GUÍA DE VOLUNTARIADO DE FAR Ya puedes acceder la recién publicada “Guía para el manejo efectivo de un programa de voluntarios en contextos de emergencia” que la Fundación Ángel Ramos (FAR) presentó a través de su iniciativa Ciudadanía Activa, en su página web (www.farpr.org). Allí encontrarás dos formatos libres de costo: libro digital para leerla y otro que te permite imprimirla. Además de la información y las recomendaciones, hallarás ejercicios de aplicación en cada etapa del texto. “Al finalizarlos tendrás un plan de implementación de desarrollo de voluntariado para tu organización o comunidad”, garantiza Morales. Para el director de la Red, la guía de FAR complementa la información sobre la protección de menores recopilada por ellos. “Nosotros sistematizamos nuestra respuesta a la emergencia y ahora FAR presenta esa mirada de los voluntarios con una herramienta súper valiosa. Se puede maximizar el recurso del voluntariado, es una forma de seguir documentado su labor que nos sirve de pareo porque me ayuda a apalancar y a retener otros fondos federales que me requieren el que demuestre ‘¿cuál es el pareo?’ A lo mejor no tengo dinero en efectivo como organización, pero sí voluntarios”, subraya Santana. “Por lo que hemos vivido en nuestro país, estamos en una constante recuperación así que diariamente tenemos voluntarios que nos ayudan a servir alimentos en el comedor comunitario de Juncos, a dar tutorías o a leer cuentos a nuestros niños en los centros Head Start, ellos no solo son parte esencial de nuestro trabajo sino incluso un aliciente”. Ya no hay marcha atrás para esta organización, sus voluntarios integran su estrategia de trabajo. Paola Díaz Báez ha sido “una extraordinaria Gerente de movilización y alcance, es una gestora brutal”. Y además crearon la plaza de Coordinadora de voluntariado, que se ocupa de movilizar voluntarios a los diversos programas de la organización. La plaza recién la ocupa Yahaira Rivera. “Por lo que hemos vivido en nuestro país, estamos en una constante recuperación así que diariamente tenemos voluntarios que nos ayudan a servir alimentos en el comedor comunitario de Juncos, a dar tutorías o a leer cuentos a nuestros niños en los centros Head Start, ellos no solo son parte esencial de nuestro trabajo sino incluso un aliciente. Además de representar un alivio para nuestra misión, también inspiran y enganchan a otros en nuestra causa y mantienes viva tu misión porque los tienes hablando de ella en sus casas, en sus trabajos y en sus comunidades”, apunta el presidente de la Red. Para Morales, la guía de FAR capitaliza “el conocimiento y la inteligencia que hemos desarrollado en Ciudadanía Activa en los últimos 7 años”, desde donde han confirmado la solidaridad del pueblo boricua. “Algo de lo que hoy no puede quedar duda es que ahí afuera hay miles de ciudadanos solidarios y dispuestos a ayudar cuando son convocados. Lo mejor que podemos hacer es compartir esa experiencia con las organizaciones y las comunidades para que estén mejor preparadas cuando reciban voluntarios listos a realizar un trabajo eficiente y alineado a las necesidades”, culmina Morales. Fotos / Suministrada
El documento libre de costo ofrece recomendaciones e información para estructurar la labor voluntaria en tu organización o comunidad. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé Presentación virtual de la nueva guía para el manejo de voluntarios en contextos de emergencia diseñada por la iniciativa, Ciudadanía Activa PR. Foto / Suministrada La palabra “emergencia”, sobre todo en estos meses, nos remite a vientos y a lluvia. Sin embargo, “emergencia” igualmente alude a otros eventos específicos que pueden afectar a una comunidad, como puede ser la violencia o la falta de servicios básicos. En ambos casos el respaldo de los voluntarios es vital para superarla y para que su labor sea más efectiva, la Fundación Ángel Ramos (FAR) publicó recientemente “De la movilización ciudadana al voluntariado pertinente: Guía para el manejo efectivo de un programa de voluntarios en contextos de emergencias”. La publicación de acceso gratuito está dirigida a líderes comunitarios y comparte el conocimiento acumulado acerca de la importancia de la labor ciudadana de la iniciativa de FAR, Ciudadanía Activa, a través de su trabajo con más de 100 organizaciones sin fines de lucro desde que se activó en el 2016. Está disponible en formato digital cuando accesas www.fundacionanagelramos.org. Astrid Morales, consultora y gestora de Ciudadanía Activa, indica que, aunque recientemente hemos vivido huracanes, terremotos y hasta tornados, en el contexto de la publicación, “una emergencia es una situación inesperada que afecta la cotidianeidad de la comunidad y eso genera en la gente sufrimiento y un sentimiento de abandono y pérdida”. “Sí, puede ser un huracán, pero también otros eventos que suceden en la comunidad como un evento de violencia o perdidas. La idea es que los principios en la guía ayuden a la comunidad a prepararse mejor haciendo un análisis de necesidad, un diagnóstico de recursos de cara a que pueda enfrentar cualquier emergencia”, señala Morales. El contenido de la guía está dividido en ocho partes que destacan aspectos centrales del voluntariado en contextos de emergencia. Las estrategias compartidas enfatizan cómo identificar los tipos de voluntarios; cómo encaminar los procesos para el desarrollo y manejo del programa; qué hacer ante el anuncio del evento; como definir las áreas de acción antes, durante y después; cómo documentar la labor voluntaria; cómo preparar al ejército de voluntarios; cómo convocar a la ciudadanía; y, hasta cómo comunicar el impacto de su gestión. “La guía provee destrezas, conocimientos, pasos, procedimientos y hasta preguntas de análisis crítico que les permitan enfrentar mejor una emergencia”. La guía fue presentada oficialmente el pasado 30 de junio, en un evento virtual donde participaron representantes del Tercer Sector. La posibilidad de compartir el conocimiento con más personas fue uno de los objetivos de su lanzamiento. “La guía lo que hace es sistematizar y documentar la experiencia que hemos vivido con organizaciones que hemos impactado y lo amplificamos. Queremos alcanzar no solo a las organizaciones sin fines de lucro, sino también a líderes comunitarios y a comunidades que quieran prepararse de cara a una emergencia. La guía provee destrezas, conocimientos, pasos, procedimientos y hasta preguntas de análisis crítico que les permitan enfrentar mejor una emergencia”, sostiene Astrid Morales, consultora y gestora de Ciudadanía Activa. META SIEMPRE VIVA La experiencia nos confirma que, pasados los primeros días tras la emergencia, todavía se requiere la labor del voluntariado. Cuando el impulso inicial de apoyo va menguando, por lo general, las necesidades son iguales o mayores en la comunidad. Morales indica que la guía estipula como primer paso “hacer un acervo de necesidades de las poblaciones que servimos o de la comunidad en la que estamos enclavados”. “A partir de entender los riesgos de la comunidad, ya tú sabes cómo te puedes preparar. Luego agarras el resultado de ese diagnóstico y te preguntas ‘de acuerdo con nuestras competencias y capacidades, ¿qué queremos o podemos atender en una emergencia?’. Esa información nos acerca a ese proceso de convocar y reclutar voluntarios y a determinar cuál es el alcance de las intervenciones, qué vamos a hacer sabiendo que serán a mediano de plazo. La recuperación comienza al día después de la emergencia y puede prolongarse entre seis meses y un año”, explica Morales. Ese justamente es el reto, mantener la meta viva entre el voluntariado. “La ciudadanía debe entender que la emergencia es una carrera de largo aliento y requiere continuidad en las intervenciones. Eso se logra rindiendo cuentas constantemente, hablando del impacto logrado y comunicando las necesidades, así seremos más efectivos en mantener la continuidad en la movilización de voluntarios. De lo contrario, el interés de la ciudadanía disminuye”, alerta la experta de Ciudadanía Activa. Agrega Morales que las evaluaciones realizadas por el centenar de participantes del grupo piloto y de la presentación oficial de la guía “son excepcionales” y se describe el contenido como “pertinente y necesario”. “Las participantes dicen que, con la información de la guía y la presentación —que fue un espacio de resumen y para reflexionar— se sienten están mejor preparados para hacer los análisis en sus comunidades y organizaciones e implementar las recomendaciones”, celebra. Por su parte Laura López, directora ejecutiva de FAR, afirma que “durante los pasados años, Puerto Rico ha enfrentado una serie de emergencias que han afectado significativa y adversamente el bienestar de nuestra gente”. “Es importante que cada día tengamos mayor conciencia sobre la urgencia de atender situaciones inesperadas de forma ágil y organizada. Por eso, es fundamental la existencia de programas activos y efectivos de voluntariado, pues ante la incertidumbre que provocan estos eventos, la labor voluntaria ha demostrado ser movilizadora y catalizadora de recursos para las organizaciones y las comunidades a las que sirven”, culminó López. Ciudadanía Activa Impacto desde el 2016: • 100 + organizaciones sin fines de lucro • 7,200 voluntarios movilizados en la isla • 160 mil horas de servicio directo en organizaciones sin fines de lucro • Casi $2 millones de dólares en el valor económico del tiempo donado Fuente: Astrid Morales Fotos / Suministradas
A lo largo de once sábados, veinte jóvenes de diversas edades recibieron adiestramientos para aprender a consumir información de manera crítica. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé El fotógrafo José R. Madera durante su taller en el Medioscopio 2023. Foto / Suministrada Al final de una de las dinámicas del Medioscopio 2023 que auscultaba qué aprendieron, algunos jóvenes participantes respondieron: “no informarme solamente con un medio”. “Ese aprendizaje se lo llevaron ese día de taller y para mí es algo muy valioso. Llevo 15 años dedicada al news literacy y saber que todavía es pertinente enseñar sobre esa diversidad de medios para informarte es bien importante para mí; el tema es relevante y útil para ellos”, afirma Anette Sofía Ruiz Morales, recurso que brindó el taller “Mirada crítica a los medios de comunicación”. El Medioscopio es un proyecto de alfabetización mediática y periodismo ciudadano, coordinado por el Instituto de Formación Periodística del Centro de Periodismo Investigativo (CPI), en el que se brindan herramientas para el desarrollo de proyectos de comunicación. Se espera que sus participantes puedan producir contenidos y divulgar información sobre sus comunidades por medio de escritos, fotografías, videos y materiales creados para las redes sociales. La periodista Vanessa Colón Almenas presenta el género de foto-ensayo a los participantes. Foto / Suministrad Como proyecto piloto, el Medioscopio comenzó el año pasado con jóvenes de Loíza y, este 2023, se enfocó en veinte participantes de pueblos sureños como Arroyo, Patillas, Guayama, Salinas y Santa Isabel, además de que amplió el criterio de edad, por lo que abarcaba desde los 12 hasta los 30 años. Comenzaron a laborar el 25 de marzo. Ruiz ha participado en ambas ediciones del Medioscopio y menciona que entre las preocupaciones de los participantes figuran “aspectos de contaminación en el ambiente, la falta de oportunidades en sus pueblos y aspectos culturales que les permitan reforzar su identidad, como sucede en Loíza con la bomba”. “El Medioscopio es una forma de reconectar con lo que está pasando con la juventud y de conocer sus preocupaciones y temas de interés, también vimos que el beneficio del aprendizaje es inmediato”, subraya Ruiz. Coralis Cruz tiene 28 años, reside en Guayama y labora en la Casa Comunitaria de Medios en Salinas. Es una de las participantes mayores del Medioscopio 2023, que celebró su evento de cierre el pasado 17 de junio en la sede de la Iniciativa para el Ecodesarrollo de la Bahía de Jobos (IDEBAJO), ubicada en Salinas. “A mí me pareció súper bien y no sé si fue debido al contexto multigeneracional. Una compañera, Yesenia Santos, y yo éramos las mayores del grupo y nos lo disfrutamos igual que los jovencitos, aprendimos un montón. Pienso que saber sobre el periodismo es algo de lo que todos pueden beneficiarse, la interacción con los talleristas fue buena”, opina Cruz. “Tendemos a infantilizar a los jóvenes y estos talleres hacen que los reten un poco, saquen esas maneras de pensar y los pongan a cuestionar”. Específicamente, le interesó aprender sobre “las distintas formas de comunicar una noticia”. “A mí me encantó aprender sobre el foto-ensayo en el taller de Vanessa Colón Almenas. Tenemos la perspectiva del periodismo tradicional en el que estás con un micrófono, tienes a la persona delante y le haces preguntas, y saber que hay otras formas me impresionó. Para el trabajo final nos llevaron a las oficinas del CPI en San Juan y me gustó mucho porque nos enseñaron cómo trabajan su página web, me llaman la atención las historias orales”, agrega Cruz. Destacó además que participantes más jóvenes lograron unir intereses y temas de actualidad en sus proyectos. “Rey y su grupo hicieron un podcast que unió el deporte y la falta de energía eléctrica en su comunidad que surgió de sus experiencias, estaban en una final y se fue la luz. Tendemos a infantilizar a los jóvenes y estos talleres hacen que los reten un poco, saquen esas maneras de pensar y los pongan a cuestionar”, apunta la participante. “Le recomiendo esta experiencia a grupos de la isla que tengan jóvenes y puedan cogerla para que no solo sepan de periodismo si no que aprendan a comunicar lo que deseen de sus experiencias en las comunidades y te dan herramientas desde el celular. Estamos envueltos en las redes sociales y pienso que esa parte puede llamarles mucho la atención”, agrega Cruz. CELULAR EN MANO La periodista Damaris Suárez imparte el taller de voz y dicción. Foto / Suministrada El uso del móvil fue clave en el taller “Fotografía con el celular” que brindó el fotógrafo José R. Madera. “Tuve unos 10 participantes, casi todos adolescentes de escuela superior. Los vi en Salinas y me preguntaron muchas cosas técnicas, les hablé de composición y encuadre. Había algunos que estaban bien ‘pompiaos’ y me preguntaban, hubo buena interacción con ellos. Me les acercaba cuando los veía ‘fajaos’ y les corregía el tiro en la cámara”, detalla Madera. Para el fotógrafo, aquellos que tienen interés de aprender sobre un tema y nunca disponen de interacciones con especialistas, la oportunidad que le ofrece el Medioscopio es enriquecedora. “La experiencia es individual, pero esto los puede impactar bien brutal. Creo que es un buen arranque; para el que nunca ha tenido una experiencia similar puede hacer un cambio en la sociedad, a veces muchos chamaquitos se descarrilan porque nunca ven nada distinto”, sostiene Madera. Como parte del evento de cierre, se inauguró una exposición fotográfica en la Casa Comunitaria de Medios de IDEBAJO y, además, se presentaron los trabajos finales que desarrolló el grupo. Para el reclutamiento de jóvenes, el CPI llegó hasta varias escuelas superiores del sureste de Puerto Rico a presentar el proyecto: Elvira M Colón (Santa Isabel), Natividad Rodríguez (Arroyo) y Rafael López Landrón (Guayama). También, contaron con participantes de IDEBAJO y de la Escuela Adela Brenes Texidor (Salinas). Foto / Suministrada Para Víctor Rodríguez, gerente del Instituto de Formación Periodística del CPI, la importancia del Medioscopio para la organización radica en que permite “proveerles [a las comunidades] las herramientas para que ellos puedan desarrollar sus propias narrativas y que puedan insertarse en las conversaciones sobre las situaciones que les están afectando directamente”. Con él coincide Roberto Thomas, coordinador de IDEBAJO, quien expresó su satisfacción con que los jóvenes decidieran crear proyectos dirigidos a atender problemáticas ambientales que afectan sus comunidades en el sur. “La aspiración es que este grupo quede interesado en el tema y entienda que esto [IDEBAJO] es un espacio en donde pueden aprovechar y traer ideas para que construyamos en conjunto”, aseguró Thomas. La directora ejecutiva del CPI, Carla Minet, aseguró que iniciativas como Medioscopio son importantes dado que “les permite a nuestros periodistas venir a comunidades de forma consecuente y tener contacto con los jóvenes, escuchar sus problemáticas, sus preocupaciones, sus propuestas, y entender cómo se informan. Así que, para nosotros es una experiencia de aprendizaje”. El CPI aspira a continuar con la iniciativa Medioscopio y llevarla a otros sectores del país. Conoce más en Facebook @Centro de Periodismo Investigativo. Medioscopio: iniciativas desarrolladas El Vecino Indeseado De Aguirre (Fotoensayo) Miembros de Medioscopio 2023 te orientarán sobre la Central Termoeléctrica de Aguirre que genera contaminantes químicos que impactan la salud humana.El Vecino Indeseado De Aguirre (@elvecinoindeseado) • Instagram photos and videos Santa Isabel en llamas (Fotoensayo) En 2022, el municipio de Santa Isabel registró 125 fuegos forestales. Por esa razón, integrantes de Medioscopio 2023 desarrollaron la página de IG @S.I.ENLLAMAS, con la que esperan educar a sus vecinos sobre la importancia de mitigar cualquier situación que pueda dar paso a un fuego forestal. La plataforma también espera que las personas reporten y alerten sobre nuevos eventos para beneficio de las autoridades y la comunidad.Santa Isabel en Llamas (@s.i.enllamas) • Instagram photos and videos “SE SECA EL MALECÓN” (Vídeo) Presentación de entrevistas a pescadores de Arroyo que comentan sobre cómo la sequía en las aguas del malecón amenaza su pesca y su sustento.Míralo aquí. "JÓVENES POR EL SOL" (Podcast) ¿Qué opinan los y las jóvenes del sur sobre la crisis energética que vive Puerto Rico? En conversación con Hery Colón Zayas, coordinador de la Casa Comunitaria de Medios y con Juan Rosario, exrepresentante de la ciudadanía en la AEE, se reflexiona sobre cuáles deben ser las soluciones para esta problemática. En Spotify: Escúchalo aquíEn Anchore (para quien no tiene Spotify): Escúchalo aquí Medioscopio: talleres y recursos Taller #1 - Mirada crítica a los medios de comunicación Annette Sofía Ruiz, comunicadora Taller #2 Qué es la desinformación y cómo desmontarla Luis Joel Méndez y Tatiana Díaz, CPI Taller #3 Periodismo Ciudadano + estrategias de comunicación comunitariaRafal Díaz Torres y Víctor Rodríguez Velázquez, CPI Taller #4 Marco legal de acceso a la información públicaCarlos Francisco Ramos, CPI Taller #5 Charla de Racismo Ambiental y taller sobre cómo crear contenido no sexistaCristina del Mar Quiles y Ruth Santiago, abogada ambiental Taller #6 Excursión Caribe Fest Caribe Fest Taller #7 Capacitación Fotográfica + CalceJosé Madera, fotógrafo y Vanessa Colón Almenas, CPI Taller #8: Brainstorming Proyectos Finales Ishbel Cora, Carla Minet, Luis Joel Méndez, Vanessa Colón Almenas y Víctor Rodríguez Velázquez, CPI Taller #9: Gira al CPITaller de voz y dicción Damaris Suárez, Norenid Feliciano, Luis Joel Méndez, Vanessa Colón Almenas, José Encarnación Taller #10: Cierre proyectos finales Norenid Feliciano, Luis Joel Méndez, Vanessa Colón Almenas, Carla Minet, José Encarnación