Inspirados en la Semana de la Niñez Temprana, organizaciones integrantes de nuestra Iniciativa Preescolar, compartirán en Oenegé guías y actividades para procurar el amplio bienestar de los niños en casa. Comenzamos la serie con ALCANZA, programa de la Universidad de Puerto Rico.
Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé
Pensamos en proteger a nuestros pequeños ante el coronavirus y con igual premura debemos atender sus necesidades emocionales. La cuarentena, aunque intensa por toda la tensión que propicia, puede ser también una experiencia formativa para nuestros niños. Sí, ellos también serán marcados por la vivencia y podemos lograr que la huella sea positiva.
Celebramos la Semana de la Niñez Temprana durante este periodo especial, compartiendo recomendaciones para que quienes estén a cargo de los niños en estos momentos puedan reforzar distintos aspectos de su aprendizaje y bienestar.
Consultamos organizaciones sin fines de lucro adscritas a nuestra Iniciativa Preescolar, las cuales presentarán en nuestro Oenegé actividades ideales para esta cuarentena. Espera las guías que ofrecerán APRENDO, de Fondos Unidos de Puerto Rico; Instituto Nueva Escuela; Integración de las Artes Visuales del Museo de Arte de Puerto Rico, Despertar Musical del Conservatorio de Música de Puerto Rico; y ALCANZA, de la Universidad de Puerto Rico.
Justo con Annette López de Méndez, directora de ALCANZA, comenzamos esta serie revisando prácticas apropiadas de enseñaza durante el distanciamiento social.
“El llamado es a entender qué necesita cada niño y a proveer para eso. Debemos atender nuestras emociones, nuestro sentido de solidaridad, nuestras necesidades y trabajar a partir de esas prioridades”, puntualiza sobre el llamado principal que debe cobijar a todos en la familia.
“Hay que entender que no estoy solo, podemos compartir, podemos reír -aún dentro de todo lo que estamos viviendo- podemos gozar, podemos sacar una manguera y mojarnos en el patio con nuestros hijos, jugar con los carritos, con las mascotas, atender las plantas, todo eso es importante que suceda. Pero no se trata de dejar que las cosas ocurran al garete, debemos establecer una rutina para darle estabilidad a nuestros hijos en este periodo”, agrega López de ALCANZA.
Por supuesto, podemos ser flexibles, pero a los niños les ayudará saber que hay un orden; hay tiempo para todos y ellos aprenden todo el tiempo. Esto recomienda la directora de ALCANZA:
1-No olvides jugar
¿Sabías que jugar es parte importante del proceso de aprendizaje de los pequeños? Por ejemplo, los niños entre los 5 y 8 años que están expuestos a la educación a distancia, necesitan como parte de ese proceso educativo hallar respuestas jugando y gozar con en ese descubrimiento. No te concentres solamente en si contestó bien o no, presta atención también a la búsqueda de la respuesta y cómo la descifró.
2-Brinda estabilidad emocional
Si estás tranquilo, tendrás mayor paciencia para manejar la convivencia. El modelaje es vital en el aprendizaje y los ojos de los menores están puestos en ti. Separa un momento para abrazarlos, para besarlos, para entender que no estamos solos. Llama a ese tío que hace reír a tus hijos, procura que vean a los abuelos, contacta a sus amigos de las escuela para que puedan verse en videollamadas, porque detalles como estos no solo les brindan un respiro sino que aportan seguridad.
3-Querida rutina
Establecer una rutina será tu aliada para poner orden en estos días tan similares unos de otros. Saber que hay un plan de actividades básicas establecido te permite improvisar con mayor comodidad. Por ejemplo, debe haber un tiempo para despertarse, desayunar, ayudar en las tareas de la casa, jugar, aprender, almorzar, hacer tareas, descansar, hacer algo nuevo como pintar o una receta, cenar, llamar a algunos seres queridos, ver películas y dormir. Ajusta el itinerario a tus necesidades y costumbres familiares. Sé flexible cuando amerite cambios y varía la rutina de vez en cuando.
4-Expresen emociones
No es fácil sentarse a ventilar emociones pero es necesario, especialmente en épocas en las que no tenemos control de los sucesos que vivimos. Usemos entonces otras técnicas para conversar, expresar, compartir ideas y planes futuros. Puede ser mientras pintan, montan un rompecabezas o antes de la siesta. Identifica el momento y aprovecha para saber lo que sienten tus hijos en estos momentos y para validar esas emociones que probablemente son similares a las tuyas.
5-Evita emociones negativas
Vivimos aislados, pero no en una burbuja y nuestros niños deben entender el periodo histórico que nos ha tocado. Expliquémosles los aspectos de prevención que deben conocer sobre el coronavirus sin alarmarlos y aprovechemos para inculcar sensibilidad, resiliencia y cooperación. ¿Cómo? Con tu ejemplo. Antes de ir al supermercado, pregúntale a ese vecino que vive solo y es mayor de edad si necesita algo, ocúpate de saber cómo están otros, incluye a tus hijos en acciones solidarias y cuando recuerden la cuarentena por coronavirus en sus vidas, identificarán un momento en el que aprendieron a ser humanos.
*Espera la semana próxima más recomendaciones de actividades para trabajar en casa en este periodo de distanciamiento físico.