Santa María ha sido miembro de la Junta de Directores de la Fundación desde 2014 y cuenta con una extensa experiencia en el Tercer Sector puertorriqueño, así como con una prestigiosa carrera como Contador Público Autorizado, habiendo sido socio principal de la firma PricewaterhouseCoopers LLP, Puerto Rico, de la que se retiró en los pasados años. Santa María fue seleccionado luego de un proceso de análisis enfocado principalmente en el futuro de la institución ante la difícil situación por la que atraviesa Puerto Rico.
La trayectoria de Santa María en el sector sin fines de lucro inicia desde mediados de 1980 como miembro de la Junta de Gobernadores de Fondos Unidos de Puerto Rico. Desde estonces, ocupó diversas posiciones, incluyendo dos términos como presidente de la Junta, así como presidente del Comité Ejecutivo. En su rol promovió el desarrollo de esta institución, cuya labor ha aportado a cientos de organizaciones en el país. Además, Santa María fue por diez años miembro de la Junta de Gobernadores de United Way Worldwide, entidad con la que aún mantiene vínculos como parte del Comité de Auditoría.
Fondos Unidos de Puerto Rico reconoció en 1996 su trayectoria en el sector con su máximo reconocimiento, el Rafael Fábregas Award. Como CPA, el Colegio de Contadores Públicos de Puerto Rico también lo reconoció en 1995 por su Servicio a la Comunidad.
Cortés Dapena informó que Santa María trabajará mano a mano con la directora ejecutiva de la institución, la señora Laura López, su tesorero el CPA Fernando Vargas, y el personal de la Fundación con el objetivo de fortalecer la entidad ante los enormes retos que enfrenta el Tercer Sector y la crisis social y económica que impacta a Puerto Rico. “Estamos convencidos que nuestra Fundación debe insertarse de lleno en la recuperación y la reconfiguración de un nuevo Puerto Rico”, añadió.
| “Para mí ha sido un verdadero honor el poder dedicar estos pasados diez años de mi vida a la presidencia de esta gran institución que tanto bien ha hecho por Puerto Rico”. |
Asimismo, Cortés Dapena indicó que su retiro es el inicio de una transición ordenada en la gerencia de la Fundación, institución que siempre estará íntimamente ligada al futuro de Puerto Rico. “Para mí ha sido un verdadero honor el poder dedicar estos pasados diez años de mi vida a la presidencia de esta gran institución que tanto bien ha hecho por Puerto Rico. No fue una decisión fácil, pero como profesional siempre he procurado encontrar el momento adecuado para realizar, de forma organizada, un cambio gerencial. Roberto ha demostrado que tiene la experiencia, capacidad y compromiso para dirigir la Fundación en este momento tan importante para la institución”, enfatizó el licenciado Cortés Dapena.
Por su parte, Santa María reconoció la obra que realiza la Fundación. “Creo en el rigor y la intensidad con que maneja cada uno de sus programas, creo en su equipo de trabajo y en la visión que han tenido sus directivos desde que esta se fundó hace 60 años. Sobre todo, creo en el Puerto Rico al que esta institución aspira y confío en la fuerza del Tercer Sector para alcanzarlo. Siento un profundo sentido de responsabilidad y de compromiso con la Fundación Ángel Ramos y con Puerto Rico. Aprovecho esta oportunidad para agradecerle a la Junta la confianza que han tenido en mí para dar continuidad a la labor excepcional que realiza la institución”.
Con la misión de mejorar la calidad de vida de los puertorriqueños, la Fundación se creó en el 1958, comenzó a operar en el 1964 y, al presente, es la principal institución filantrópica de Puerto Rico. Desde su creación, ha donado más de $100 millones a instituciones sin fines de lucro en el país en las áreas de educación, cultura, arte y servicios humanos.
La Fundación otorga donativos a organizaciones sin fines de lucro para que estas puedan alcanzar su máximo desarrollo y potenciar su obra filantrópica. Actualmente, su iniciativa principal está enfocada en la educación preescolar. Además, promueve programas y donativos dirigidos a fortalecer y expandir la capacidad de las organizaciones que rinden servicios directos a la comunidad.
Por otro lado, la Fundación concede anualmente el Premio Tina Hills que reconoce a una organización sin fines de lucro que se distingue por su trayectoria y extraordinaria aportación a mejorar la calidad de vida en el país. Este año la Fundación tendrá una edición especial del Premio Tina Hills 2018, que reconocerá la respuesta directa de un grupo de organizaciones sin fines de lucro ante la emergencia creada tras el devastador paso de los huracanes Irma y María.
Foto: Javier del Valle
