Desde que Enrique Adsuar González encaminó esta organización privada sin fines de lucro en el año 1996, poco a poco ha ido impulsando el desarrollo económico de la isla mediante programas que alcanzan tanto a futuros empresarios como a los que ya tienen activas sus iniciativas. Esfuerzos como I-Corps Puerto Rico, IDEA Seed Fund, Guayacan Venture Accelerator (GVA) y EnterPRize han procurado cumplir la meta siguiendo un modelo que entrelaza el aspecto educativo de estas iniciativas con la inversión privada. Reforzar y optimizar un ecosistema empresarial con valor social en el país es una misión constante.
EnterPRize ofrecerá por primera vez más de $170,000 en premios de capital semilla en esta decimocuarta edición del certamen de negocios. Contarán también con el apoyo de la Fundación Ángel Ramos que otorgará $10,000 en la nueva categoría de Arte y Cultura. Otros auspiciadores debutan también en la competencia para destacar áreas como empresarismo femenino o innovación social, entre otros.
Establecida en el año 2005, la competencia ha impactado 2,000 empresas emergentes y ha otorgado $1,101,500 en capital semilla. Ha evolucionado con el paso del tiempo; se estrenó como un certamen de ideas de negocios, pasó luego a enfocarse en los planes de negocios, después fue EnterPRize Next y ahora es EnterPRize Business Building Competition.
“Los programas de Guayacán, todos, tienen como eje principal el tema educativo”, menciona Laura Cantero, directora ejecutiva de la organización.
“Así que no es solamente el aspecto de mentoría, coaching y asesoría, sino que también la gente viene a los programas de Guayacán a aprender. Por ese lado sé que hay interés por parte de la Fundación Ángel Ramos en tener acceso a ese contenido, para potencialmente evaluar cómo el mismo se puede utilizar a favor de las organizaciones que apoya. Yo creo que es la riqueza y el valor del contenido, además del proceso educativo lo que atrae de esta competencia; no es simplemente que estamos compitiendo por un premio para ganarnos el dinero, sino que el premio realmente es poder pasar por el proceso”, agrega Cantero.
Cabe señalar que esta edición de EnterPRize es la que mayor cantidad de premios en capital semilla ofrecen.
“A largo plazo queremos crear empresas que tengan un impacto económico y social en sus comunidades”, puntualiza Cantero. “Más allá de poder educar estos empresarios y darle las herramientas que necesitan para establecer sus organizaciones y sus empresas de una manera sostenible, es realmente buscando que puedan tener un impacto en sus comunidades en términos de poder ofrecer los productos y servicios que tienen. Y también lo trabajamos desde un punto de vista de crear los empleos que puedan impactar, no solamente a las personas que usa la organización o la empresa sino a más personas de su entorno inmediato”.
CAMBIO DE PERFIL
Por los pasados seis años, Cantero ha estado al frente de la competencia y ha observado las diferencias en el perfil demográfico de sus participantes y ganadores. Mucho ha variado desde que el proyecto Rebex ganó la primera edición.
“Ha cambiado grandemente”, acepta la directora. “Y yo te diría que esto tiene dos factores”.
Menciona primero el factor sociológico, evidente en “gente con diferentes perfiles a lo que uno pensaría que está pensando montar su empresa”.
“Cuando empezó la competencia se buscaba atraer estudiantes en los centros universitarios, por ejemplo, que estuvieran ansiosos por crear algo nuevo, por montar una empresa desde cero. Y aunque esos casos los estamos viendo también, ahora estamos viendo gente acercarse a la competencia que son más experimentados, quizás no en esa empresa en particular en que solicitan, pero gente que ha estado diez, quince, veinte años haciendo otra cosa y ahora, por la situación económica que vive Puerto Rico, ha decidido emprender”, añade.
Ciudadanos de la tercera edad dominaron los premios entre el 2013 y el 2016 sin que mediara una campaña específica para atraerlos. Luego llegó “el año de María”, el 2017, y el fenómeno atmosférico provocó la posposición de la premiación hasta abril del 2018. La ganadora llevaba más de veinte años laborando como abogada cuando decidió embarcarse en el negocio de la producción del queso de cabra Lucía, en Juncos. La ganadora aprovechó sus conocimientos legales para redactar un reglamento para esta industria, que ya utiliza el Departamento de Agricultura, dado que no existían precedentes.
“Yo creo que hacer ese cambio o dar ese salto sin duda da vértigo, pero lo que nosotros hemos visto es que las organizaciones y las empresas más resilientes son las que se atreven a decir ‘pues me tengo que meter en aguas profundas en algo que no tengo ni idea en cómo se hace, pero no importa porque confío en que tengo el aguante y el talento para hacerlo’”. |
“Hoy en día existe una industria gracias a eso”, apunta Cantero.
El segundo factor es la velocidad con que se logran cambios. El ganador del año pasado es un ingeniero que decidió emprender para lograr una tarea pendiente en su trabajo a la que nunca podía dedicarle tiempo: un software que ayuda a identificar errores en el proceso de manufactura en las farmacéuticas.
“Ese muchacho empezó con nosotros en abril del año pasado y en diciembre, cuando fue la premiación, ya tenía una empresa montada con el primer contrato con clientes vendidos. O sea que uno también ve cómo un producto, de pasar por esos procesos, puede acelerar y en cuestión de meses pueden tener una empresa montada”.
LAS INDUSTRIAS TAMBIÉN CAMBIAN
Sí, cambia el perfil de los empresarios, pero también las industrias en las que se proponen comenzar un negocio. Aunque nunca faltan las sugerencias para que se dediquen a atender un segmento del mercado en específico, la directora de Guayacán declara que hacerlo “es imposible”.
“En un mercado como el de Puerto Rico, donde todo es tan naciente, pues hay oportunidad en todas las industrias”, dice y menciona que las solicitudes en el área de Agricultura siempre abundan.
Un área en la que hay amplio espacio de desarrollo es en Arte y Cultura. El pasado diciembre, Cantero fue invitada por el Instituto de Cultura Puertorriqueña para ver los finalistas de su programa Fábricas culturales. “Yo quedé loca con la cantidad de talento innato y buenas ideas que vi allí. Quizás a mi me sorprendió porque no es mi área de expertise, pero vi tanta gente que hacía estas cosas por amor al arte sin darse cuenta de que tenían en las manos una oportunidad de negocios súper valiosa”, relata.
Sobre la participación de la Fundación Ángel Ramos en esta categoría resalta que “ambas organizaciones estamos viendo esta colaboración como una plataforma de poder brindar a las organizaciones que apoya la fundación, o a empresarios en el área de arte y cultura, una plataforma de aprendizaje y acompañamiento para que puedan montar sus negocios y organizaciones de la mejor manera posible”.
EnterPRize, a fin de cuentas, viabiliza que muchas ideas tomen forma. “Aquí creamos procesos, abrimos una ventana de oportunidad para hacer una empresa sostenible”, resume. “Cómo lo monto, con los cimientos correctos, para asegurarme que esto va a tener tracción y va a tener impacto”.
Ver las transformaciones de los participantes resulta emotivo para el equipo de Grupo Guayacán.
“Es un privilegio poder estar uno en una situación donde habilitas todo esto”, confiesa. “Hay gente que después de ganar premios te escribe mensajes diciéndote ‘me acuerdo el primer día que llegué aquí que yo no sabía nada, no sabía si podía hacerlo y de repente se me abrieron todas estas puertas sin saber que esto existía’. Realmente es un privilegio y un honor poder hacer esto por Puerto Rico que, al final, es el norte común”.
Sobre ese Puerto Rico también opina Cantero al afirmar que existen oportunidades “para la gente que se atreve a hacer algo radicalmente distinto a lo que han hecho hasta el momento”.
“Yo creo que hacer ese cambio o dar ese salto sin duda da vértigo, pero lo que nosotros hemos visto es que las organizaciones y las empresas más resilientes son las que se atreven a decir ‘pues me tengo que meter en aguas profundas en algo que no tengo ni idea en cómo se hace, pero no importa porque confío en que tengo el aguante y el talento para hacerlo’. Sin duda, son esas personas las que terminan siendo más exitosas”, finaliza Cantero la entrevista.
Fotos: Suministradas