El mismo viernes luego del paso del ciclón, añadieron a su oferta la entrega de 300 almuerzos a personas sin hogar o envejecientes sin redes de apoyo en sectores de San Juan como La Perla, Viejo San Juan, La Colectora, Río Piedras-Plaza de la Convalecencia o Centro Médico, entre otros. El número de desayunos servidos va por 150 y el de almuerzos está en 470 diarios.

"Fondita, lo que hizo, fue retomar sus inicios de llevar comida a la calle. Con los voluntarios existentes y los empleados de siempre empezamos a trabajar después de María. La entrega de almuerzos se está haciendo en zonas en las que hacíamos trabajo", indica Socorro Rivera Rosa, directora ejecutiva de la organización.

Rivera alerta que el huracán provocará ajustes en la población que a diario sirven, ya que esta será "más amplia y diversa", especialmente entre el segmento de envejecientes "tanto los que se quedaron sin techo como los que se quedaron sin redes de apoyo".

"María ha sido un despertar de cantazo a una situación que es más seria de lo que se había pensado", menciona la directora para luego añadir, "esta población no está en condiciones físicas ni económicas para empezar de cero ni tiene una red de apoyo estructurada por parte del Gobierno".

Rivera señaló que en igual circunstancia de "incertidumbre" están personas que han perdido todo y por primera vez dependen de ayuda y hasta de un plato de comida caliente brindado por otros. Ese grupo también se ha acercado a Fondita de Jesús.

"Aunque hemos tenido problemas en nuestras facilidades, María nos dejó de pie y hemos podido trabajar.  Esto es un reto más grande pero nosotros siempre hemos trabajado con los más vulnerables", acaba Rivera.

Fotos: Javier del Valle