“Esta trayectoria merece reconocimiento y, como parte de la celebración, la Fundación crea y publica el catálogo de las primeras diez exposiciones, tanto impreso como en su portal web, para conservar esta historia tan rica que hemos ido formando junto a los artistas que nos han acompañado”, expresó el Lcdo. Rafael Cortés Dapena, presidente de la Fundación Ángel Ramos.

Cada uno de esos artistas ha transformado a SalaFAR en una galería donde se estudia y se observa la creatividad, la vida y toda su gama de complejidades. Desde diciembre de 2010 hasta diciembre de 2012, pasaron por la salael escultor Luis Torruellas, quien inspiró su exposición en la composición musical Verde Luz de El Topo; el pintor Edwin Guevárez, quien nos presenta el tema de la mujer negro-latina en el mundo anglosajón; el fotógrafo Héctor Méndez Caratini, quien documentó “la Fiebre”, esos “intrépidos corredores de carros de carreras”, desde una perspectiva contemporánea.

El pintor Santiago Flores Charneco, en su exhibiciónCuerpo estelar presentó “un mundo de formas abstractas que pudiéramos asociar con la flora y la fauna del litoral marino. Representaciones de objetos comunes y corrientes, como los moluscos y las estrellas de mar, que se convierten en cuerpos sublimes; imágenes que, tal vez por un instante, revelen el carácter de nuestro entorno isleño de una manera en que antes no lo habíamos visto”.

También están representados en el catálogo los niños, niñas y adolescentes participantes de la Galería ActivArte del Museo de Arte de Puerto Rico, quienes expusieron en la Navidad de 2011 en torno a la alegría, los colores y la música de esta época en Puerto Rico. Las escultoras María Luisa Borrás, Cecile Molina e Ivonne Prats, a través del barro y la loza, expusieron su trabajo en conjunto. Prats creó su obra en torno a las esencias sicológicas y biológicas de la mujer y el hombre, formaciones “antropomórficas con símbolos sicológicos – emocionales y referencias de osamentaria humana”. Molina se centró en el medio cerámico y la creación de un lenguage orgánico y Borrás exploró “líneas, formas y pliegues para concebir espacios positivos y negativos”.

En su expo Sinóptica, el escultor Luis Felipe Passalacqua reflexionó sobre el lenguaje del silencio: “Vemos con las manos, pensamos con los dedos y sentimos con el alma por medio del diálogo que ocurre dentro del más inmaculado silencio”.

Los niños y niñas de Verano a Color, niños y niñas del campamento de Humana, el Museo de Arte de Ponce, La Perla del Viejo San Juan y el Museo de Arte de Puerto Rico exploraron con su particular creatividad la belleza de la naturaleza en esa estación casi permanente de nuestro país.

El pintor Eliseo Echevarría, quien con el refranero Sabiduría de la fauna rescata los refranes populares, usando la ilustración pictóricamente para enfatizar en ellos. Por último, el artista Luis de la Rosa Chapel, con su exhibición Perpetuum Mobile, define un movimiento perpetuo que intenta acaparar la atención del espectador, no solo por su propuesta cromática sino por ese ‘estar y no estar’ de su constante movimiento”.

“La SalaFAR ha resultado ser un proyecto sumamente exitoso”, expresa el Lcdo. Cortés Dapena. “Su espacio ha albergado exposiciones extraordinarias que han conmovido y provocado el interés de muchos artistas de exhibir sus obras en la sala. Por eso, celebramos la producción de este catálogo que evidencia la excelencia estética y la importancia de promover el arte en Puerto Rico”.