"Cuando comencé mis talleres en el Museo, rápidamente que empezamos a tomar todas las clases quise ponerlo en práctica en mi salón, así que ambienté en él un área llamada Museolandia", explicó la maestra del  centro Head Start de Buenaventura en Carolina.

López Genera describe su experiencia como "algo inolvidable". Su última clase fue a mediados de marzo. Fueron 10 sábados consecutivos. Lo bueno del programa, según la maestra, es que la técnica aprendida el sábado en el taller se puede trabajar el lunes en el salón.

La maestra cuenta, que para ella, lo más importante ha sido ser testigo de cómo los niños y niñas se involucran y se comprometen con los valores. Incluir un área de artes en el salón de clases ayudó para que todos los días los niños y niñas recuerden las destrezas artísticas aprendidas en clases, así como para reforzar valores como la disciplina y el compañerismo.

El programa Integración de las Artes Visuales Puertorriqueñas al Currículo Preescolar del MAPR adiestra a maestros y maestras  para que integren a su currículo las artes visuales puertorriqueñas a nivel preescolar. Para que esto ocurra, los participantes tienen la oportunidad de hacer uso del recurso pedagógico que reguardan las obras de la Galería activARTE Fundación Ángel Ramos en el Museo de Arte de Puerto Rico (MAPR). Estos talleres van dirigidos a educadores que trabajen con niños y niñas hasta los 7 años. Justo ahí está el éxito del programa.

De acuerdo a los resultados que arrojó el informe Integración de las artes al currículo realizado en el 2012 por la profesora Nereida J. Rodríguez, en los ambientes educativos impactados por el programa se observó la integración y uso de recursos educativos en el salón de clases. Incluso, en el 100% de los salones visitados se demostró una educación apropiada mediada por el estudio de obras de arte de la Galería activARTE. Los educadores lograron trabajar variedad de contenidos con énfasis en lenguaje, lógico matemático y científico. Mientras que algunos, también integraron el área tecnológica a través de las artes.

El informe, también, reveló que los niños y niñas de los ambientes educativos impactados conocen y aplican variedad de técnicas al realizar sus obras, dominan conceptos artísticos y desarrollan un significativo sentido de apreciación a las artes.

Para Jackeline Capó, maestra de arte de un colegio privado, el éxito del programa recae en que es una iniciativa que brinda la oportunidad de que todos los educadores ―tanto a nivel público como privado― puedan ser partícipes de estos cursos.

"La integración de las artes visuales en el currículo académico sea de preescolar, elemental o escuela intermedia o superior es sumamente importante. Yo creo que los maestros de clases académicas necesitan unas herramientas adicionales para lograr desarrollarse en diferentes destrezas y pensamientos. Las artes visuales y la integración de las bellas artes es la manera perfecta de poder llegar a esa meta, de desarrollar pensamiento crítico, análisis y el desarrollo de las diferentes inteligencias", agregó la también voluntaria del museo.

La suma de los valores en estos talleres no solamente se queda en el salón de clases ni la mente del educador, también llega a los hogares, donde los padres y madres, buscan integrarse a las prácticas de sus hijos.

La maestra del  centro Head Start de Buenaventura en Carolina, López Genera, dice que una de las experiencias más gratificantes que le brindó este programa fue compartir cada sábado con sus talleristas las vivencias en el salón, y también, ver como estos niños y niñas transmitían sus conocimientos a sus casas.

"El beneficio que tanto nosotros los maestros hemos adquirido al tomar cada uno de estos talleres sábado tras sábado fue bien enriquecedor. Número uno, aprendimos técnicas que no imaginábamos que se podían hacer y  número dos, le dieron mucho énfasis a los valores que tanto los niños preescolares los necesitan", sostuvo.