No solo familias, iglesias y organizaciones sin fines de lucro han dado la mano en la reconstrucción del país. Esta compañía privada ha encontrado el gusto de servir.
Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé
Ayudar a otros no es una tarea ajena en la lista de deberes de la compañía de servicios de contabilidad, BDO Puerto Rico. Con sede en Santurce, desde hace cinco años cuentan con un programa de ayuda comunitaria que, en principio, tuvo en la mira a las escuelas y estudiantes vecinos a quienes apoyaban con tutorías y becas.
Cuando quisieron hacer más, tocaron las puertas de la Fundación Ángel Ramos y de la Fundación Extra Bases para estructurar la logística de un plan de ayuda. "Queríamos brindar nuestras manos para hacer lo que hiciera falta", rememora Ryan Marín sobre BDO Cares, rama encargada de prácticas de responsabilidad social de la firma que cuenta con 250 empleados y 60 contratistas.
Las comunidades socorren a sus vecinos más vulnerables auxiliadas por organizaciones siempre presentes
Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé
Con base en Loíza, Taller Salud atiende además comunidades de limitados recursos económicos en Río Grande, Luquillo, Fajardo y Vieques, entre otras, reforzando aspectos de salud, equidad de género e interrupción de violencia. La organización identificó las necesidades de familias vulnerables, personas encamadas y sus cuidadores, mujeres y niños, a quienes brindó apoyo inmediato. Igual viabilizó la llegada de ayuda a refugios en la zona.
Arte, orientación, comida, talleres. Y es que la sede en Santurce de este museo se convirtió en un remanso de sosiego para su comunidad.
Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé
"El museo es la casa de todos los vecinos", escuchó una vez decir a un santurcino Marianne Ramírez Aponte, directora del Museo de Arte Contemporáneo (MAC), ubicado en la antigua Escuela Labra en Santurce.
Palabras proféticas.
Tan pronto pasó el huracán María, abrieron la casa para recibir al público y adaptaron programas.
Entre el 4 y el 20 de octubre atendieron a diario 70 niños de las comunidades tradicionalmente impactadas por el programa "MAC en el Barrio", que se transformó en el "Programa Escolar de Emergencia". Artistas brindaron talleres que resultaron de entretenimiento, aprendizaje y desahogo a estos residentes de Hipódromo, Machuchal, Figueroa, Buenos Aires, Tras Talleres, Los Lirios, Manuel A. Pérez y San José. Además se les sirvió almuerzo y, a veces, alcanzó para compartirlo con sus padres cuando iban a recogerlos.
Agradecidos por la oportunidad de encaminar sus vidas, residentes de este hogar devuelven esperanza a comunidades golpeadas.
Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé
En el corazón de Puerta de Tierra, en San Juan, encuentras este hogar de vivienda transitoria para personas que carecen de un techo. Hasta un máximo de dos años pueden allí pernoctar mientras son ayudados en su proceso de rehabilitación y reintegración a la sociedad atendiendo el aspecto físico, mental y espiritual. Hasta que llegó el huracán María.
"Los residentes mismos nos pidieron ayudar, ellos fueron las primeras brigadas que se ocuparon de limpiar los escombros para dejar las vías limpias aquí en Puerta de Tierra, son parte de nuestro Plan de Emergencia. Para ellos es importante ayudar, están agradecidos de estar aquí y sienten que deben aportar al país", cuenta Cruz Rafael Caraballo Cruz, administrador del hogar.