La Fundación Chana y Samuel Levis es una de las primeras entidades en dedicarse exclusivamente a trabajar las destrezas sociales y emocionales. Por Ana Castillo MuñozOENEGÉ Como todos los lunes, lo esperan. Cachorro llega al salón escondido dentro de una caja roja y sale cuando la maestra anuncia que le toca hablar. A él le divierte conversar con los niños y niñas. Habla mucho, en especial de aquellas cosas que pueden ayudar a que nos comuniquemos mejor. A Cachorro le gustan los ambientes escolares. En su última conversación con los estudiantes de la escuela elemental Luis Llorens Torres, comenzó su discurso ladrando y conversando sobre las reglas y la importancia de sabernos enfocar.
El gobernador Alejandro García Padilla celebró el triunfo del Coro de Niños de San Juan en Italia con un homenaje en La Fortaleza Por Ana Teresa Toro Oenegé Es un coro que no basta escuchar. Hay que mirarlo. Hay que ver cómo la música les afecta, los conmueve. Hay que maravillarse por la manera en que sus rostros nos revelan con sus gestos el significado de cada una de las frases que cantan como una sola voz. Porque a decir verdad, si una cosa ha procurado afianzar el Coro de Niños de San Juan (CNSJ) -a lo largo de sus casi cincuenta años de trayectoria que celebra el próximo año- lo es la forja de una voz propia, una identidad sonora, un modo de interpretar que es reflejo de lo que niños y jóvenes puertorriqueños son capaces de construir cuando descubren el arte y cuentan con una persona que los guíe en el proceso.
El artista, quien trabajó en las piezas por los pasados dos años, expone por primera vez una colección de dibujos en la SalaFAR. Ana Castillo Muñoz OENEGÉ La última vez que el artista Rigoberto Quintana visitó su Cuba natal adelantó el viaje de regreso. El haber regresado a su país y darse cuenta de que el tiempo había pasado, pero todo seguía intacto le impactó. Quintana, lleva 21 años viviendo en Puerto Rico y cuenta que, a diferencia de como le sucedía en su país, cuando abre los ojos, sus alrededores están inundados de imágenes. El celular, el bombardeo de las redes, la prensa, los afiches de la calle, la gente. Lo que define como “mucha visualidad en el ambiente”.
Además de las presentaciones para público general, la compañía realizará funciones escolares a las cuales también serán invitadas distintas comunidades de escasos recursos para que asistan de manera gratuita. Por Ana Castillo MuñozOENEGÉ Una flor que adormece y enamora. El zumo. Un bosque mágico. Un personaje arrogante e inalcanzable que se enamora perdidamente de un burro. Y el final indescifrable. De eso se trata la pieza Sueño de una noche de verano que estará presentando Ballet Concierto de Puerto Rico (BCPR) en su ya tradicional Festival de Coreógrafos que se llevará a cabo del 9 al 12 de octubre en la Sala René Marqués del Centro de Bellas Artes Luis A. Ferré en Santurce. Durante los pasados 29 años, la institución ha organizado este evento ininterrumpidamente.
El oxímoron con el que Rigoberto Quintana titula su muestra más reciente en la SalaFAR de la Fundación Ángel Ramos, Inmensos diminutos, sugiere otro a la inversa: el del pequeño gigante, como el que alguna vez fuera El pensador de Auguste Rodin. Originalmente conocido por el nombre de “El poeta”, la primera vez que el público vio la escultura, esta presidía – con apenas 27 pulgadas de alto – el imponente conjunto de las puertas del infierno desde su dintel. Más de dos décadas pasaron antes de que Rodin, en un acto verdaderamente redundante, triplicara el tamaño del pensante que ya muchos consideraban un coloso, puesto que en el arte, contrario a la acepción popular del término, lo monumental no se circunscribe a dimensiones exorbitantes. Lo mismo podría decirse del espacio en el que se exponen las catorce piezas de pequeño formato que Quintana ha ejecutado con gran celo y que no con menos ha dejado salir de su taller. Destinada anteriormente a la entrega y pago de anuncios para el periódico El Mundo, esta área de tránsito entre el vestíbulo y la cafetería del Edificio Fundación Ángel Ramos es hoy un reducido salón de exposiciones que, no teniendo cuatro paredes del todo, ha conseguido potenciar consistentemente la obra que allí se ha expuesto desde que abriera sus “puertas” en el año 2010.