La Escuela Montessori San Cristóbal que sirve a los niños del albergue, procedentes de otras entidades y de la comunidad, ahora extiende sus ofrecimientos hasta sexto grado y se mudarán a un nuevo espacio que ya construyen. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé La Escuela Montessori San Cristóbal inició con niños del Hogar Casa Cuna San Cristóbal y, al año y medio de labores, abrieron las puertas a vecinos de la comunidad. Ruth Gabriela Melián saluda afable desde que abre el portón de entrada del centro educativo del Hogar Cuna San Cristóbal. La directora lo hace con el orgullo de quien sabe que la labor que realizan en la Escuela Montessori San Cristóbal es sobresaliente y a lo largo de nuestro recorrido por el plantel, nos contará por qué. En la década del 90, el Hogar Cuna San Cristóbal atendía a víctimas de violencia doméstica, evolucionando con rapidez hasta convertirse en un hogar para niños maltratados. La “casita” contigua al hogar que hoy alberga la Escuela Montessori San Cristóbal fue donada por el productor Paquito Cordero y ubica en el barrio Río Cañas de Caguas. “Este espacio era del Hogar y no se podía quedar vacío. A la misma vez, (el personal y su Junta directiva) se habían dado cuenta de que los nenes del Hogar que iban a las escuelitas de la comunidad no recibían una educación sensible, consciente a las necesidades de no estar con tus papás y haber vivido trauma, así que deciden que este edificio lo iban a convertir escuelita. Escogieron el método Montessori, me encontraron a mí y arrancaron en el 2014”, cuenta Melián sobre los inicios de la iniciativa educativa en los que fue consultora y luego fungió como guía Montessori del nivel preescolar, Casa de niños, durante los años en que Ivonne Vélez, directora del Hogar, también lideró además la escuela. Ruth Gabriela Melián, directora de la escuela Entonces considerado un proyecto educativo piloto, la Escuela Montessori San Cristóbal inició con niños del Hogar y, al año y medio de labores, abrieron las puertas a vecinos de la comunidad. “Hemos ido creciendo en el proceso. Ver que sus niños acababan en Casa de niños y se tenían que mover les dolía a los padres, como también les afectaba (a los empleados) que los niños del Hogar fueran a la escuelita de la comunidad después de estar tan bien cuidados aquí. Había resistencia. Así que recogieron dinero en el 2018 y en el 2019 abrimos el nivel elemental hasta tercer grado, aprovechando las oficinas del hogar para habilitar espacios. Ahora hicieron un movimiento similar, desde el 2023 estuvieron recogiendo dinero y este mes de agosto inauguramos la elemental hasta sexto grado en un vagón que se adquirió mediante la recaudación de fondos”, celebra Melián entusiasmada. La Escuela Montessori San Cristóbal cuenta con una matrícula con 13 niños de Infantil, 0 a 3 años; 21 entre las edades de 3 a 6 años en Casa de Niños y otros 21 en Taller 1 y 2, de nivel elemental. Además de las clases regulares brindan Arte, Música, trabajan un huerto donde se exponen a las lecciones que brinda el desarrollo de la naturaleza y disfrutan de un programa luego de clases que culmina a las 5:30 p.m. “Hay cosas que pasan a nivel preescolar que uno no verá hasta que el niño sea más grande. Esa es la etapa de sembrar semilla, pero no sabes si será un árbol de mango, un húcar o un flamboyán". Ruth Gabriela Melián Directora de la Escuela Montessori San Cristóbal Quienes han respaldado la iniciativa educativa están complacidos con sus logros. Para Melián el proyecto ha demostrado dos cosas fundamentales: “que el método Montessori funciona para sanar el trauma en niños que han vivido negligencia y maltrato, y que debe sostenerse la propuesta para que las familias que no han vivido el traume reconozcan este espacio como uno que también acompaña dentro de los procesos de crianza y educación”. El vínculo con la comunidad se ha fortalecido con el paso del tiempo. Dos semanas después del huracán María en el 2017, la escuela ya brindaba servicios. Durante el encuentro de familias para prepararse para el año escolar celebrado a finales de julio, un papá compartió una memoria de la pandemia por COVID-19. “Él dijo que lo más especial que él sintió de nuestra comunidad fue que le prestamos nuestros materiales para que pudieran trabajar Montessori con los niños en casa y que los llamábamos para preguntar cómo estaban los nenes y cómo estaban los padres también. Contar con un personal capacitado para entender cómo el trauma afecta los procesos de aprendizaje en niños, pero también como impacta a nivel de comunidad es una realidad que hay que trabajar desde la sensibilidad, desde el respeto, desde el acompañamiento y la solidaridad; creo que es uno de los mayores éxitos”, subraya. LA SEMILLA Y EL ABONO Actualmente, reciben niños en las etapas: infantil, Casa de niños y Taller 1 y 2 de nivel elemental. Cuando se trabaja en educación temprana, los maestros están conscientes de que siembran destrezas y probablemente no verán cómo florezcan. Melián indica que fue difícil seguirles la pista a los niños que partían del Hogar en kínder o eran adoptados. “Hay cosas que pasan a nivel preescolar que uno no verá hasta que el niño sea más grande. Esa es la etapa de sembrar semilla, pero no sabes si será un árbol de mango, un húcar o un flamboyán. Al principio podíamos saber de algunos niñitos que iba a una escuela cerca y sus informes de progreso decían que terminaban las tareas que iniciaban, tenían gracia y cortesía, que podían controlar un poco sus emociones y, aunque hubiera un problema específico de aprendizaje como déficit de atención o en términos cognitivos, por lo menos terminaban las tareas que iniciaban y les gustaba trabajar. Con el tiempo hemos comprobado que eso se gana aquí, con el currículo de Casa de niños, ese amor por trabajar, esa disposición por hacer es una belleza”, describe Melián. Una vez establecidos los grados de elemental, pueden recibir niños de mayor edad, tendencia que han visto aumentar luego del establecimiento de Family First, “ahora están llegando a los hogares o bien bebés o niños grandes de hasta seis años”. “Están poblando nuestra elemental, lo que antes difícilmente veíamos con los niños de los hogares. El currículo de Taller 1 -que es elemental- es bien nutrido en valores y justicia social, así que si en el preescolar preguntan ‘¿qué es esto?’, en elemental preguntan ‘¿por qué?’. El currículo insta a que sigan haciendo preguntas e investigando”, abunda la directora sobre una interminable lista de cuestionamientos que van desde por qué vives en el Hogar, por qué tienes una mamá o dos mamás, por qué no comes carne hasta por qué los dinosaurios se extinguieron. “Todas esas preguntas tienen una gama de respuestas preciosas para que el niño siga buscando posibles soluciones a un problema. Los niños de Taller 1 pueden salvar el mundo porque dentro de la socialización y los procesos, en ese ambiente buscan la manera de trabajar por un mundo mejor”, dice en torno al aspecto educativo. En cambio, en el aspecto social se refleja cuan asimiladas están ambas poblaciones: los que viven en el Hogar y los que llegan del exterior. Como parte del currículo educativo integran Arte, Música, la creación de un huerto y un programa extendido hasta las 5:30 p.m. “Lo que se palpa en Taller 1 son niños que a lo mejor estuvieron en otras escuelitas antes de su proceso de transición de su hogar, -aunque fuera maltratante, pero era su casa-, a llegar a un hogar de grupo. Hemos visto es que llegan heridos, pero a nivel elemental entre pares se sostienen, se apoyan, son solidarios, son empáticos; en esa etapa el adulto es importante pero más lo son mis amiguitos”, indica. La solidez de la relación entre ambos grupos Melián la atribuye a que los niños externos a la escuelita, “han estado aquí desde bebés”. “No hay que pasar trabajo modelando solidaridad y empatía porque desde pequeños han visto como hay amiguitos que entran y salen, a lo mejor en el preescolar lloran un montón o tienen una manifestación de coraje y ellos mismos van viendo cómo van madurando, entienden por qué cruzan al hogar al salir de la escuela, en las fiestas están sus cuidadores y los saludas y los niños del Hogar saludan a sus papás, es bien natural. La única diferencia que vemos entre ambos grados es que en elemental el niño pregunta”, destaca. A partir del 2023 la Escuela Montessori San Cristóbal acogió a los niños de la Fundación Hogar Niñito Jesús en Cupey Alto. “Estamos bien contentos, el primer año entraron con cuatro becas, el año pasado con seis y este año tienen diez. Los tenemos desde bien chiquitos también así que estamos bien felices con eso”, señala. MUDANZA A LA VISTA La integración con la comunidad y el trabajo desde las etapas primarias del desarrollo son dos de los pilares de la filosofía educativa que promueven. “Ya no cabemos aquí, el edificio no aguanta más”, dice Melián durante el recorrido en el que invadimos en silencio el área de trabajo de los pequeños. “El 16 de octubre de 2024 nos regalaron ese terreno de al frente”, dice Melián señalando el predio de terreno con una estructura, “esta semana comienzan a demoler”. Sí la Escuela Montessori San Cristóbal cruzará la calle donde se construirá la nueva estructura diseñada por el arquitecto Mario Montilla, quien se ocupó de la remodelación del Hogar. La inversión asciende a $5 millones. “La Junta dice que lo haremos en dos años y medio. El edificio propone dos casas de niños con espacio más grande, mejor espacio para Infantes, para Andarines, áreas de reunión -que ahora no tenemos-, más estacionamiento. En vez de huerto, los nenes dicen que tendremos vacas porque les parece una finca”, cuenta entre risas Melián y aclara, “las vacas no van”. Melián se ha dedicado a liderar voluntades, a encausar intenciones de personas de diversos sectores que comparten el deseo de mejorar la vida de los estudiantes. “Lo más importante es que la gente sienta que pertenece. Cuando miras lo que la UNESCO tiene que decir sobre la educación de calidad dice que el niño tiene que ser incluido, debe sentir que pertenece y la propuesta de este espacio siempre ha sido eso”, describe la directora. “La idea es una escuela con puertas abiertas a la comunidad, se está perdiendo ese tesoro comunitario que hay, queremos rescatarlo y trabajarlo con mucho amor. Así que desde el día uno el secreto siempre ha sido: ‘¿Eres madre de la comunidad y quieres leer un cuento? Ven’. ‘¿Quieres acompañarnos a una excursión o ayudarnos a hacer una receta de cocina?’ ‘¿Eres chofer de autobuses y quieres llevarnos a las giras? Vamos a cotizar contigo’. ‘¿Los vecinos necesitan el estacionamiento para un mercado comunitario? Te lo prestamos. Eso es ser parte de una escuela de la comunidad, que el educador sienta que tiene un rol activo y presente”. En la escuelita riegan las semillas en sus alumnos para que crezcan sus destrezas de aprendizaje, pero también para que hagan la magia de la sanación. “Creemos en esto. Los mejor de trabajar aquí es saber que estamos haciendo lo que nos gusta, porque educar es nuestra pasión, pero también ayudando al país con una comunidad que no se visibiliza y cuyo trauma no se toma en cuenta. Al principio es una responsabilidad personal y luego de país, los montessorianos decimos que esta es nuestra tarea cósmica, para eso fui escogida”, culmina Melián. Conoce más sobre el progreso en la Escuela Montessori San Cristóbal aquí: montessorisancristobal.org. Fotos / Javier del Valle
Desde recién nacidos, bebés expuestos a entornos de maltrato y negligencia pueden mostrar sus secuelas, pero las posibilidades de sanación son elevadas. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé Los puntos de encuentro entre el método montessoriano y las herramientas clave para el manejo del trauma en los niños e infantes ha sido clave en el desarrollo de la escuela. Recién nacidos que no lloran, bebés que no gatean, niños que no hablan, cuando en estos casos se descartan causas neurológicas o de índole física, el diagnóstico apunta en otra dirección: trauma. Cada vez que el instinto de supervivencia enciende las alarmas, nuestro organismo entra en un modo de alerta que puede extenderse por años si se trata de un entorno de maltrato y negligencia consistente. Si eres recién nacido, infante o niño, es muy probable que tu cerebro esté dominado por esa aprehensión, quedando en un segundo plano las funciones que deben desarrollarse de forma natural en las distintas etapas del crecimiento. La razón es simple, no está en la lista de prioridades del cerebro porque más importante es sobrevivir. El trauma no pide autorización para almacenarse en nuestro cuerpo y, la mayoría de las veces, no lo percibimos. En el caso de niños en edad temprana, profesionales adiestrados en trauma no sólo pueden identificar la causa del retraso, mejor aún, pueden sanarlo. En la Escuela Montessori San Cristóbal, que atiende niños del Hogar Cuna San Cristóbal, de la Fundación Hogar Niñito Jesús en Cupey Alto y de la comunidad del Barrio Cañas, donde están ubicados en Caguas, lo han logrado cada vez que propician que el bebé, infante o niño sienta seguridad en su entorno, conecte con alguna cuidadora y, más importante aún, se sienta amado. “Cuando empezamos a educarnos como expertos en trauma observamos que para que haya un déficit de atención o un rezago en coordinación de movimiento, tiene que haber pasado algo más por eso es importante conocer el historial del niño". Ruth Gabriela Melián Directora Escuela Montessori San Cristóbal ¿El trauma es regenerable?, le preguntamos a Ruth Gabriela Melián, directora del Montessori San Cristóbal y su respuesta es inmediata. “Completamente”, dice. “Cuando estudiamos la teoría de educación sensible al trauma hay unos indicadores que se alinean al método o filosofía Montessori. Por ejemplo, para apoyar a niños con trauma lo ideal es que sus rutinas sean siempre consistentes porque esto les permite la oportunidad de que puedan predecir lo que va a pasar. Eso es un consejo de educación sensible al trauma, que todos los días se haga exactamente lo mismo porque así un niño que no está acostumbrado a la consistencia -porque no sabe a qué hora va a comer, a qué hora va a dormir, dónde va a dormir y cuándo le van a dar un golpe-, al llegar a vivir en este tipo de espacio por lo menos cuenta con la seguridad de que la merienda siempre se va a servir a las nueve de la mañana, la disciplina es distinta y no hay golpes”, explica Melián, vinculada a la escuela desde el 2014 y con formación Montessoriana. Otra recomendación que va a tono con los indicadores es “que los niños tengan la oportunidad de escoger”. “Imagina a un niño que lo remueven de su casa. El día en que el Departamento de la Familia llega no le pregunta ‘¿qué juguete te quieres llevar?’, se lo lleva y ya, no puede escoger ni su regalo favorito. La bendición de la filosofía Montessori para sanar el trauma es que el niño puede escoger con qué quiere jugar y con qué quiere trabajar. Esos indicadores para nosotras son fundamentales”, subraya la directora. La integración de la naturaleza al currículo escolar es un componente importante en la experiencia integral de cada niño. El acompañamiento de los adultos es importante. Durante días sensibles como el Día de las Madres o Día de los Padres, así como en tareas escolares que puedan afectarles como el famoso Árbol genealógico de grados preescolares, realizan otras actividades. Por ejemplo, en la escuela Montessori el Día de las Madres se torna en el día especial de la cuidadora preferida del niño, la que le da un beso cada mañana. “El Árbol genealógico no es una práctica apropiada aquí. Hablamos de familias diversas y en elemental ya hablamos de adopción. Celebramos cuando a un nene lo adoptan o lo despedimos cuando se tiene que ir a otro Hogar, pero no está la tarea forzada de decirle ‘así son las familias y te tienes que adaptar a alguna’”, indica. Si te preguntas cómo se las ingenian para celebrar los cumpleaños sin herir sensibilidades, la filosofía Montessori salva la situación con su tarea, Línea de vida. “Los cumpleaños aquí también son diferentes a un espacio tradicional porque si invitas familias a las ceremonias habrá este despliegue de amor y eso hiere tanto al niño del Hogar como al que el papá no puede apoyar por su trabajo. Nosotros aprovechamos la ceremonia de la Línea de la vida Montessori. Tomamos muchas fotos de los niños trabajando en la escuela para que el Hogar tenga -allá les hacen muchísimas también- y la cuidadora favorita del nene viene a la ceremonia. El niño prepara su Línea de la vida aquí, con todas sus fotos, y prepara su bizcochito con sus amiguitos aquí. Cuando llegan los invitados, vienen a ver la presentación de la Línea de la vida y a cantar cumpleaños como si fuera una lección Montessori. Esto lo hacemos para cuidar esos corazones” agrega la directora. ¿QUÉ PODEMOS HACER? Para muchos niños y niñas la llegada tanto al hogar como a la escuela constituye la primera vez en su experiencia de vida en la que se sienten seguros y en un ambiente propicio para su desarrollo. Melián indica que documentarse en torno a la educación en edad temprana es esencial “porque ocurren unos hitos en el desarrollo que son bien importantes” y debemos conocerlos. “La recomendación va dirigida a entrenar al adulto en trauma, que es algo que hacemos con el personal porque, por ejemplo, que un niño no hable no es nada más un indicador de un rezago del habla y el lenguaje, no es simplemente un asunto cognitivo. Quienes educamos sensible al trauma estamos convencidos de que un diagnóstico de rezago en el habla, de déficit de atención e hiperactividad responde a unos procesos que todavía no se están dando de neuroplasticidad, de conexiones neurológicas o de ajustes que van a responder a maltrato o negligencia”, apunta. Desde su primer día en la escuelita, Melián identificó que los bebés que habían llegado al Hogar desde recién nacidos como entregas voluntarias de sus madres exhibían más rezago en habla, en lenguaje y en el área ocupacional. Así comenzaron a hacer conexiones entre la vivencia previa y el grado de desarrollo alcanzado. A cinco años del establecimiento de la Escuela Montessori San Cristóbal, realizaron un estudio con estos hallazgos que presentaron durante una conferencia celebrada en Boston en el 2023. “Cuando empezamos a educarnos como expertos en trauma observamos que para que haya un déficit de atención o un rezago en coordinación de movimiento, tiene que haber pasado algo más por eso es importante conocer el historial del niño. Lo que hemos hecho es que se trabaja tipo terapia o refuerzo, reforzamos a través lecciones, trabajo y estímulos todas esas áreas de oportunidad, esos rezagos; podemos saber cuánto sufrimiento pudo haber pasado un bebé en una entrega voluntaria por lo rígido que se mantienen los músculos de su cuerpo todavía a los dos meses de nacido”, dice Melián aludiendo al despego maternal durante el embarazo. “El apego es fundamental para sobrevivir, te da seguridad”, insiste. Los resultados positivos que han visto desde la apertura de la escuela en el 2014 les convocan a continuar dando a conocer no sólo su metodología, sino el impacto transformador que pueden tener en el desarrollo pleno de un niño desde sus etapas más tempranas de vida. La directora cuenta casos de bebés que llegaban sin siquiera arrastarse y, tras los estímulos correctos, comienzan a gatear. La seguridad, la serenidad y la conexión con una cuidadora tienen como resultado el que disminuyan los niveles de alerta y el cerebro tome como tarea principal su desarrollo. Si mamá está sometida a un ambiente de violencia y abuso troncha las posibilidades de desarrollo de sus hijos ya que “es como si no estuviera presente en sus vidas, no se vincula saludablemente”. La Escuela Montessori San Cristóbal ha fortalecido alianzas con instituciones y profesionales que ayudan a los niños a superar el trauma. “Tenemos bien andamiado el cómo evaluar o referir esas cosas que la escuela no llega a trabajar y cómo se adopta el tratamiento en los hogares. Tenemos excelentes terapistas sensibles al trauma. No vemos a un niño como un participante más para contar que le dimos el servicio, cada niño requiere de un trabajo completamente distinto y nos da una lección porque aquí no hay una receta”. Melián insta a que otros albergues conozcan su labor para que puedan ayudar también a los menores de edad a su cargo. “Soñamos con replicar este modelo, quizás en algún momento desde el simple acompañamiento de Hogares para que tengan Montessori en casa y a mediano o largo plazo saber que en un Hogar en, por ejemplo, Mayagüez, hicieron un Montessori al ladito porque había un edificio y lo convirtieron en escuelita para sus niños. Esa es la meta. ¿No sería maravilloso?”, cuestiona la directora confiada en el poder sanador del amor. Aprende más sobre la labor de la escuela visitando: montessorisancristobal.org. Fotos / Javier del Valle
Tatiana Pérez Rivera conversa en Oenegé, el pódcast con Eliezer Budasoff y Alana Casanova Burgess, oradores principales de la Cátedra Ángel Ramos de la Universidad de Puerto Rico Por Oenegé De izquiera a derecha Alana Casanova Burgess, Eliezer Budasoff y Tatiana Pérez Rivera durante la grabación en directo de Oenegé, el pódcast en la UPR, recinto de Río Piedras. Tiene la radio ese poder combinado que viene con la intimidad del susurro, del hablarte al oído a ti y sólo a ti, y con la posibilidad de llevar esa intimidad a la pluralidad de millones de personas escuchando a la vez. Lo íntimo como experiencia colectiva, la voz alta como reflejo de la interioridad del pensamiento. En la actualidad, el espacio del pódcast ha llevado esa experiencia a posibilidades creativas y experimentales que trascienden esa experiencia primaria que representó la radio. Las nuevas propuestas narrativas en audio han expandido los modos de contar historias, han incorporado elementos de producción más sofisticados y han generado una nueva relación entre quien escucha y quien genera esos relatos sonoros que aguardan por ti ahí, en una aplicación que podrás escuchar y pausar según tu voluntad. Una voz que se rinde a tus pies y, con suerte, te sacude también. En esta edición de Oenegé, el pódcast conversamos con dos figuras clave de la comunidad de podcasteros en el continente y quienes este año han recibido la Cátedra Ángel Ramos y protagonizan la Segunda Jornada Ángel Ramos de Comunicación e Información en la Universidad de Puerto Rico, recinto de Río Piedras. Se trata de Eliezer Budasoff y Alana Casanova Burgess. La grabación se dio en el marco de la Segunda Jornada de Comunicación e Información Ángel Ramos en la UPR, que contó con conferencias magistrales, talleres y foros abiertos al público general, al estudiantado y a periodistas. Casanova Burgess es una periodista de ascendencia puertorriqueña y caribeña establecida en Nueva York y, entre sus múltiples proyectos, ha sido reconocida como presentadora de La Brega, un laureado pódcast bilingüe sobre Puerto Rico y sus diásporas. Cuenta con una vasta experiencia en periodismo en audio trabajando en WNYC Radio en Nueva York donde se ha destacado produciendo reportajes documentales y radio en vivo. Su obra ha sido presentada por NPR, The New Yorker, The Guardian, LatinoUSA y Radio Lab, entre otros. Anteriormente, fue productora de On The Media, un programa de radio a nivel nacional en los Estados Unidos sobre análisis de medios y narrativas históricas. Budasoff es periodista argentino y director de desarrollo de nuevos pódcast en Radio Ambulante Studios, donde también es editor y copresentador en El hilo. Fue coproductor de la serie Bukele: el señor de Los Sueños. Se desempeñó como director editorial de The New York Times en Español y como editor de proyectos especiales del diario El País en América. Fue también editor de las revistas Etiqueta Negra y Etiqueta Verde. Es coeditor del libro Rabia. Crónicas contra el cinismo en América Latina (Anagrama, 2022) y mentor del Journalism Fund Europe. Sus textos y reportajes se han publicado en distintos medios de América y Europa. Ambos comparten su conocimiento en esta edición especial de Oenegé, el pódcast que grabamos en la Universidad de Puerto Rico y ante un público estudiantil. Que disfrutes de Oenegé, el pódcast. Escúchalo aquí. Fotos: Javier del Valle
Kilómetro Cero quiere construir una comunidad que sepa manejar crisis de salud mental sin violencia, y comienza con el lanzamiento de su manual “Más vale prevenir que lamentar”. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé La descriminalización de personas que muestren una crisis de salud mental es el objetivo principal de la campaña que lidera Adli Cordero Espada. Cuántas veces una persona que vive una crisis emocional que la lleva a comportarse erráticamente recibe un castigo, en vez de acompañamiento o apoyo que procure su estabilidad. A juzgar por las noticias en los diarios, muchas. No es difícil entender la prioridad de la organización Kilómetro Cero (Km0) para cambiar esta realidad. Su campaña ¡EPA!, (siglas de Evalúa, Prepara, Acompaña), que aspira al manejo de este tipo de crisis emocionales sin la participación de la Policía, comienza con el lanzamiento de un manual y herramienta comunitaria, “Más vale prevenir que lamentar”. Accesible para descargue digital de forma gratuita, el manual brinda ejercicios de desescalada de conflictos y recomendaciones puntuales para acompañar a una persona en diversos escenarios, desde un ataque de pánico hasta una crisis aguda de salud mental. La propuesta estará respaldada por talleres comunitarios con especialistas en el tema, en un esfuerzo de educación a mayor escala. Su presentación tuvo lugar el pasado 28 de agosto, en el espacio La Goyco, en Santurce, con un panel en el que participaron colaboradores como Rafi Torruella, sicólogo y director de Intercambios PR; Sonia Cepeda, sicóloga y decana en la Universidad Carlos Albizu; María Soledad Sáez Matos, abogada en la Sociedad para la Asistencia Legal y presidenta de Junta en Km Cero; y Adli Cordero Espada, coordinadora de la campaña y directora de Proyectos de Km0. “Una de las cosas que ha hecho que trabajemos con esta iniciativa comunitaria y con estas alternativas de desescalada de crisis, es que reconocemos que el proceso de lograr un reclamo mayor para que se establezca una estructura salubrista que maneje la crisis de salud mental nos va a demorar más tiempo. Dentro de lo que se ha hecho en Km0 y lo que hemos podido documentar de violencia policial, ya hemos visto que el uso de fuerza en casos de personas que están viviendo una crisis de salud mental -incluso a través de procesos como una 408- tiene un impacto bien alto”, informa Cordero Espada. La ley 408 se utiliza para solicitar una hospitalización involuntaria en un centro de salud mental cuando la persona es mayor de edad, es el recurso legal que busca asegurar que reciba algún tipo de tratamiento médico. Puerto Rico no cuenta con una estructura salubrista que atienda crisis de salud mental. Cuando ocurren, cualquier llamada desemboca en la Policía ya que es considerada la primera línea de respuesta, aunque esté en vigor la ley 408. KM0 ha documentado varios casos de intervenciones fallidas de la Uniformada. Por ejemplo, el veterano Daniel Maldonado Díaz fue asesinado -frente a su familia y frente a su casa- durante una intervención policiaca a causa de su crisis por salud mental en Utuado. Igual suerte corrieron en similares circunstancias Anthony Maldonado Avilés, Aixa López Otero y Jeremías Fret Molina, este último falleció tras recibir tres descargas del dispositivo de control electrónico o taser, de parte de uno de los diez policías que intervinieron con él durante una crisis. La campaña de Km0 tiene como meta que el gobierno establezca una unidad de respuesta a crisis emocionales con una infraestructura salubrista y no punitiva. Mientras eso sucede, la organización apuesta a que la práctica se filtre a través de los procesos educativos comunitarios, mediante la labor de organizaciones que trabajan junto a líderes, participantes y familias. “Que se dejen de atender estas crisis como si fuesen un crimen, un delito, que se empiece a ver que esa persona está al límite y necesita ayuda. Cualquier persona puede vivir una crisis emocional o de salud mental”. Adli Cordero Espada Coordinadora de la campaña y directora de Proyectos de Km0 “Queremos adentrarnos en el conocimiento de qué hacemos para prevenir la intervención de la Policía. Muchas veces lo que hace que las personas la llamen es que no tienen muy claro qué podemos hacer cuando un familiar, un amigo o una persona de la comunidad empieza a manifestar síntomas o señales de una crisis de salud mental; se llama a la Policía como un recurso de apoyo, pero con lo que nos estamos encontrando es que cuando llegan lo que sucede es que la violencia escala”, señala Cordero. La coordinadora de la campaña destaca que la Uniformada está adiestrada para “encontrar o ver un delito” o para discernir si la persona es “una amenaza o representa un peligro”. “No necesariamente los agentes están preparados para acompañar u ofrecer algún tipo de apoyo para que no escale la crisis”, apunta. De ahí que la herramienta busca “ofrecer una herramienta básica para las personas que acompañan a quien vive una crisis de salud mental”. “Queremos que se puedan tener unos conocimientos básicos de primeros auxilios, aunque no seamos especialistas en salud mental o sicólogos, para que sepamos qué hacer”, dice Cordero y pone como ejemplo que resulte tan común como cuando se ofrecen los primeros auxilios físicos durante emergencias. DEFINIDOS LOS RETOS INMEDIATOS Portada del manual En Km0 están conscientes de que una de las limitaciones que enfrentarán será la falta de líneas de ayuda para salud mental, más allá de la Línea Pas de ASSMCA instaurada por el gobierno. “Una de las recomendaciones que hacemos para cuando la persona necesite una ayuda para desescalar la crisis - más allá del apoyo y el acompañamiento-, es que se llame a una ambulancia y se solicite que no venga con la Policía porque es un asunto de salud mental, si no con paramédicos especializados”, señala. Cordero identifica como uno de los retos cuando se involucra a la Uniformada en estas situaciones es “que la violencia va a escalar, se vuelve un detonante para algunas personas”. “Por eso creamos esta herramienta, apostamos a la posibilidad de que desescalar la crisis ayude a que la persona pueda ir a su tratamiento; a veces ocurre que no tenían su medicación al día. Poder identificar sus necesidades, cómo acompañarlas, prevenir la intervención policial y que la persona tenga recursos salubristas de apoyo y de la red familiar, es un pilar para que pueda tener atención en el proceso y se priorice su bienestar. Esto es un inicio para poder construir una respuesta comunitaria a las crisis emocionales y de salud mental sin la Policía”. A juicio de la coordinadora de la campaña, la práctica llevaría a la descriminalización de personas que muestren una crisis de salud mental. “Que se dejen de atender estas crisis como si fuesen un crimen, un delito, que se empiece a ver que esa persona está al límite y necesita ayuda. Cualquier persona puede vivir una crisis emocional o de salud mental”, indica Cordero. Los materiales educativos -y la información que los contextualiza- están accesibles en la página quenosealapolicia.com. Fotos / Suministradas LO QUE HA DOCUMENTADO KM0 Más del 20% de las intervenciones policiales con uso de la fuerza en Puerto Rico ocurren con personas inmersas en crisis emocionales o de salud mental. Para atender situaciones de crisis de salud mental, la Policía utiliza el dispositivo de control electrónico o taseren el 61% de sus intervenciones con las personas. Esta herramienta es considerada como tortura debido al dolor extremo que provoca. Además, causa trauma, muertes y su uso está vinculado a violaciones de derechos humanos. La Policía no está capacitada para brindar cuidado durante una crisis de salud mental, su presencia puede escalarla y su uso de fuerza suele agravar el problema en vez de solucionarlo. Un 35% de la población privada de libertad en nuestro país tiene necesidades de servicios de salud mental. El 73% de la población presenta trastorno por abuso de sustancias controladas. Fuente: Informe El tercer castigo: entre la irracionalidad y la peligrosidad, de Kilómetro 0.
El periodista argentino ofreció la charla magistral de la Cátedra Ángel Ramos 2025 en la Universidad de Puerto Rico, recinto de Río Piedras, concentrada en el arraigo del pódcast en el periodismo. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé “Aristóteles nos metió en la cabeza que somos el animal que habla. Yo digo que somos el animal que escucha. Yo no nací hablando, el lenguaje me lo dio la comunidad. Pero sí nací escuchando”, Hugo Mugica, sacerdote y poeta argentino La decana de la Facultad de Información y Periodismo Julia Vélez entrega el afiche conmemorativo de la Segunda Jornada de Comunicación e Información Ángel Ramos a Laura López Torres, directora ejecutiva de la Fundación Ángel Ramos y a Roberto Santa María, presidente de la institución. El eterno poder del sonido fue recordado durante la conferencia magistral “El animal que escucha: la nueva vieja tecnología del pódcast”, presentada por Eliezer Budasoff, invitado especial de la Cátedra Ángel Ramos 2025. Su participación integró la 2da Jornada “Del sonido a la historia: la revolución del pódcast”, liderada por la Facultad de Comunicación e Información de la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras (UPR-RP) y celebrada los días 28 y 29 de agosto. El programa del evento también incluyó a otra invitada especial de la Cátedra, la periodista puertorriqueña radicada en Estados Unidos, Alana Casanova-Burgess. El recién remodelado Anfiteatro #1 de la Facultad de Estudios Generales de la UPR-RP fue sede de la actividad que contó con la asistencia de estudiantes universitarios de los recintos de Río Piedras, Humacao y Arecibo del Sistema UPR, entre otras universidades, así como de escolares de grado superior de Bayamón y Humacao. “La gente que te escucha te está permitiendo que le hables al oído. Nosotros tenemos que ser respetuosos de esto y de esa intimidad que no tiene ningún otro medio de comunicación”. Eliezer Budasoff, periodista argentino Moderado por Israel Rodríguez Sánchez, catedrático auxiliar de Información y Periodismo, el acto protocolar contó con entusiastas mensajes del CPA Roberto Santa María, presidente de la Fundación Ángel Ramos; y la arquitecta Wilma Santiago, vicepresidenta de Asuntos Académicos de la UPR, quien se expresó en representación de la presidenta, Zayira Jordán Conde. Le siguieron palabras de la rectora del recinto de Río Piedras, la doctora Angélica Varela Llavona; y de la Decana de Comunicación, doctora Julia Vélez. Además, ofreció un cálido saludo el doctor Carlos Sánchez, decano de la Facultad de Estudios Generales. Culminados los mensajes se entregó a Santa María, presidente de la FAR, y a Laura López, directora ejecutiva de FAR el afiche alusivo al evento. También, se reconoció a su creadora, la profesora Marcia Pacheco, de la UPR-Humacao, quien recibió el afiche enmarcado acompañada del director del Departamento de Comunicación del recinto del este, Héctor Piñero. EL SONIDO NO PASA DE MODA El presidente de la FAR, Roberto Santa María, destacó en su mensaje la importancia de poner el legado histórico de Ángel Ramos al servicio de la educación de las nuevas generaciones de comunicadores. Budasoff es un periodista argentino con 28 años de experiencia en el trabajo investigativo y la crónica, quien hace cinco se ha dedicado por entero al pódcast, especialmente en el espacio El Hilo, que trabaja para Radio Ambulante. “Soy nuevo y soy veterano en este formato, y esta situación me permite contarles cómo yo - dedicado al periodismo gráfico, la crónica y el editorial-, he terminado dedicándome 100 por 100 al pódcast, al audio. Por qué me he enamorado de este formato que es uno de los más potentes para hacer periodismo, sobre todo en esta época de algoritmos”, comenzó Budasoff su charla. La jornada inaugural de la Jornada contó con la participación de estudiantes de escuela superior y de recintos de la UPR como Bayamón, Humacao, Arecibo y Río Piedras, así como con alumnos de la Universidad del Sagrado Corazón y de la Interamericana. Igualmente, periodistas profesionales asistieron a varios de los eventos. Se definió el Internet de hoy como “un montón de gente detrás de sus pantallas opinando de todo”, y en estas condiciones crece el pódcast con su atractiva y accesible propuesta auditiva. “Escuchar supone sí o sí la existencia de otro y de otros, a diferencia de la imagen de una persona sola detrás de la computadora. La gente no suele pensar que en términos históricos, antropológicos y culturales estamos físicamente más preparados y dispuestos a escuchar historias. Así se ha transmitido el conocimiento por miles de años”, estableció Budasoff. El periodista identificó atractivos de la gestión podcastera como la “recuperación de la conversación”, la posibilidad de “escuchar a otras personas”, así como la oportunidad de “ir a buscar historias y contarlas a otras personas” y “romper distancias con la voz”. La rectora del recinto de Río Piedras, Dra. Angélica Varela Llavona ofreció un entusiasta saludo a los presentes y destacó el papel de las comunicaciones en la forja de una ciudadanía informada. A lo largo de su charla, el argentino presentó sonidos claves de distintos episodios de pódcasts que propiciaron el entendimiento de situaciones que suelen estar marcadas por el prejuicio. El primer ejemplo fue de gran impacto. De “Tres chicos buscan una familia en la selva del Darién”, Budasoff compartió el sonido de su entrevista a Jesús David, un adolescente en ruta a Estados Unidos, desde su Venezuela natal, que se quiebra al revelar cuánto añora escuchar la voz de su mamá. “El reflejo de la potencia de la voz en esta entrevista difícilmente la pueda tener otro formato”, afirmó el periodista. “Cuando Jesús David me dijo su sueño de llamar a su mamá fue como un golpe físico; no hice nada hasta que terminó de hablar, respeté su dolor y me alejé para fumar y para llorar por mi lado. En la época en que la catarata de información en los medios dice que la gente que cruzaba (la frontera) eran delincuentes, no hay forma de escuchar a un adolescente que lo que quiere hacer es hablar con su mamá y uno piense que los migrantes son delincuentes. Uno puede poner esto en un texto escrito, pero nada es lo mismo después de escucharlo”, indica. El periodista argentino Eliezer Budasoff disertó, entre varios temas, por espacio de una hora y media acerca del lugar del sonido, la voz y el espacio sonoro del pódcast como respuesta al tipo de periodismo que los nuevos tiempos requieren. “Esto me convenció de que esta era la historia que quería contar y es universal, porque todos -cuando estamos mal- queremos hablar con nuestra mamá. Esto se consigue a través del audio, es algo que siempre ha sabido la radio”, agregó Budasoff y mencionó cualidades compartidos entre el pódcast y la radio que resultan ser inseparables: sonido para contar una historia, expresividad de la voz humana e intimidad del oído. “La gente que te escucha te está permitiendo que le hables al oído. Nosotros tenemos que ser respetuosos de esto y de esa intimidad que no tiene ningún otro medio de comunicación”, recomendó a los estudiantes. Otros ejemplos fueron presentados a lo largo de la charla, usando episodios como “Yo nena”, trabajado por Aneris Casassus y Patricia Serrano dedicado a la experiencia de una madre con su pequeña hija trans; El fotógrafo, creado por Clara Ibarra y Alexandra Hall para reseñar cómo un detenido de la dictadura argentina captaba lo que sucedía fuera de su celda gracias a los sonidos que escuchaba; y “La noche más larga”, de David Trujillo, que traía al 2025 la toma del Palacio de Justicia en Colombia ocurrida en el 1986. En todas quedaba demostrado cómo el audio tiene posibilidad de llevar al escucha a lugares donde ni la imagen ni las palabras alcanzan. La sesión mañanera de la Jornada culminó el jueves con la grabación en directo y ante el público de un nuevo episodio de Oenegé, el pódcast junto a los invitados de la Cátedra de este año. “Para mí el pódcast ha llegado para quedarse porque puedes llevarlo contigo en todo momento cuando haces otras cosas. Siempre estamos deseosos de que nos cuenten una historia”, asegura y no descarta ni tan siquiera las que creemos que ya conocemos por entero ya que hay múltiples modos de narrarla. A quienes aspiren a dedicarse al periodismo les brindó varios consejos, pero una recomendación resultó fundamental: “El primer paso, siempre es escuchar”. “Tú no vas a los rincones más oscuros del mundo para decir ‘esto está oscuro, tú vas a iluminar, uno tiene esa obligación”, dijo sobre la ética al enfrentar situaciones complejas. Resultó inevitable hablar sobre el periodismo en épocas de autoritarismo y puntualizó que “tiene más sentido porque lo que haces es más importante”. “Escuchamos lo más ruidoso porque es lo que hace ruido. Hay un montón de gente que no hace ruido a la que le importa un periodismo respetuoso, más humano”, señaló Budasoff. Luego de la conferencia magistral, los asistentes presenciaron la grabación en vivo de Oenegé, el pódcast, de la Fundación Ángel Ramos, con la participación de Budasoff y Casanova-Burgess. Durante la sesión de la tarde, los estudiantes tomaron un taller de redacción para pódcast. Fotos / Javier del Valle