Repasamos algunas propuestas presentadas por el periodista y escritor español Álex Grijelmo en su charla magistral, “El silencio manipulador”, presentada en la USC como parte de la Cátedra Ángel Ramos. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé Durante su conferencia el autor presentó multiplicidad de ejemplos —tanto lingüísticos como periodísticos— en los que se prueba claramente el modo en que se manipula la realidad por la vía de la omisión de información clave. Eres responsable de lo que dices y también de lo que callas. Alrededor de esta propuesta el periodista y escritor español, Álex Grijelmo, compartió diversos ejemplos durante su charla magistral , “El silencio manipulador”, presentada el pasado 9 de octubre como parte de la Cátedra Ángel Ramos en el Teatro Emilio S. Belaval de la Universidad del Sagrado Corazón en Santurce. Grijelmo ofreció talleres a alumnos de bachillerato y comunicación, dictó la charla magistral y compartió con profesores en actividades enmarcadas en la cátedra. Grijelmo es autor de multiplicidad de libros académicos que hoy día son referencia para universidades de periodismo alrededor del mundo. El especialista indicó que el fin de su charla magistral era “analizar cómo el contexto rellena los silencios informativos y comprobar las dificultades jurídicas para identificar esos trucos cuando llegan a los tribunales”.Destacó que el silencio puede ser perjudicial en la comunicación y que es posible “engañar diciendo la verdad”, aludiendo la información clave que se omite. A los estudiantes y periodistas activos les presentó el dilema ético que supone que “quien emite un mensaje es responsable de los silencios”.En el caso del periodismo, el silencio manipulador se traduce en la ausencia de datos relevantes para corroborar o comprobar lo que se comunica, o en la práctica de ocultar datos relevantes para la completa comprensión del mensaje. "Si omitimos lo que es relevante, engañamos. Si destacamos una sola cosa, también". Álex Grijelmo Escritor y periodista español Para discutir el tema Grijelmo se basó en tres disciplinas: la pragmática, rama de la lingüística que estudia el sentido de lo que decimos más allá de las palabras exactas que pronunciamos; la sicolingüística, que instruye cómo el cerebro procesa los mensajes lingüísticos; y la semiótica, que estudia los sistemas de comunicación dentro de las sociedades humanas.OCUPANDO SILENCIOS Durante su estadía de una semana el autor compartió tanto con estudiantes, facultad e integrantes de la comunidad en general que llegaron hasta allí a compartir con el autor. El especialista presentó ejemplos para analizar cómo el contexto rellena silencios mediante diversas analogías. En una escultura, los silencios eran los huecos en la forma, mientras que en una imagen en la que se identificaba al futbolista Pelé, solo ciertas partes de su cuerpo estaban pintadas de negro sobre un fondo blanco. El conferenciante presentó oraciones en las que se infería un mensaje, partiendo de los datos preliminares compartidos y de los omitidos. En el cine, diversos fotogramas de la película “1492” mostraban cómo algunas imágenes adelantaban la narración de la trama sin necesidad de diálogo. En la portada de un periódico se evidenciaba el mensaje que subrayaba la edición de una fotografía -en la que solo se leían las letras “ETA” entre una frase más amplia-, acompañando el titular sobre una manifestación de los ‘albertzales’ independentistas en Bilbao. La periodista de Oenegé Tatiana Pérez Rivera entrevistó al autor y académico para la nueva edición de Oenegé, el pódcast que ya está disponible. Cada ejemplo ilustraba cómo el contexto puede alterar el significado en un mensaje, igual que lo logra su ausencia. “Si omitimos lo que es relevante, engañamos. Si destacamos una sola cosa, también”, insistió Grijalbo para más tarde agregar, “el silencio lo completamos con nuestra experiencia”.Entre sus conclusiones destacó que el cerebro completa la ausencia de datos en un mensaje, que el periodista está obligado a ser leal con su lector, que los hechos no se pueden hurtar en un contenido -especialmente periodístico-, que resulta cuesta arriba lograr que judicialmente se sancione la omisión de datos, y que los creadores de textos deben autorregularse para evitar “mentir contando hechos verdaderos”.Te invitamos a escuchar el episodio 7 de Oenegé, el pódcast, en el que entrevistamos a Álex Grijelmo en torno a lo que comunica el silencio. Escúchalo aquí.Fotos / Javier del Valle
El reconocido periodista español Alex Grijelmo participará esta semana de la Cátedra Ángel Ramos en la Universidad del Sagrado Corazón. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé Así lucía el joven Ángel Ramos cuando a los 24 años fue nombrado administrador del periódico El Mundo. Aquí desde su oficina en el edificio del Viejo San Juan del periódico. Con el experimentado periodista y escritor español Álex Grijelmo como protagonista, ya inició la Cátedra Ángel Ramos en la Universidad del Sagrado Corazón (USC) en Santurce. El comunicador comenzó a impartir clases especiales a alumnos de maestría y bachillerato de la institución educativa y dictará la charla magistral “El silencio manipulador” mañana miércoles, 9 de octubre, a las 10:00 a.m., en el Teatro Emilio S. Belaval. La entrada es libre de costo y abierta al público general. “La oportunidad de tener a Álex Grijelmo toda esta semana en la universidad fortalece el carácter de rigor académico, de profundidad crítica que buscamos a través de todos los programas académicos con nuestros estudiantes, particularmente de la Escuela de Comunicación Ferré Rangel. Su contacto con estudiantes tanto a nivel graduado, en nuestra maestría de Periodismo e innovación, y a nivel del programa subgraduado de Periodismo, va a ser importante para que ganen, desde una mirada internacional y de prestigio, una reflexión mayor sobre la importancia de la rigurosidad crítica, la reflexión ética y el pensamiento crítico que apostamos a que desarrollen durante sus estudios aquí en Sagrado y que puedan aplicar de maneras efectivas cuando entran en entornos profesionales”, indica la doctora Anuchka Ramos Ruiz, vicepresidenta de Asuntos académicos y Provost de la USC. Ángel Ramos soñó la Fundación que lleva su nombre junto a su esposa Tina Hills, quien tuvo a su cargo la ardua labor de encaminar la institución filantrópica tras su fallecimiento. Estudiantes de otras instituciones académicas han sido invitados a participar de la charla magistral. Se espera además la visita de periodistas, profesores y estudiantes. “Siempre es importante en todas las profesiones ganar perspectiva y tratar de desprenderse un poco del día a día, de la inmediatez de los asuntos que nos desbordan y nos acontecen, para poder mirar desde afuera un poco y reflexionar de esas otras formas posibles de problematizar nuestras profesiones, de entender las realidades que nos circunscriben. Esta oportunidad de una charla magistral abierta a todo el ecosistema periodístico de Puerto Rico va a permitir un espacio de reflexión común desde una mirada distinta a la del día a día. Además, para nosotros en Sagrado es importante que esta charla magistral sea abierta a todo el público porque es nuestra manera de continuar reforzando la importancia de conectar la academia, el sector educativo -sobre todo a nivel superior-, con el sector profesional”, sostiene Ramos. Agrega que la Escuela de Periodismo Ferré Rangel tiene como un objetivo consistente propiciar el espacio para la reflexión sobre el oficio periodístico. “Ha sido un proceso de planificación de casi un año. La Cátedra Ángel Ramos reafirma la figura de don Ángel Ramos, que ha sido absolutamente clave en todo el desarrollo del periodismo y la telecomunicación en Puerto Rico. Para nosotros eso es súper importante porque conectamos la Escuela de Comunicación Ferré Rangel, con todo lo que representa ese nombre, con la figura de don Ángel Ramos". Dra. Anuchka Ramos Ruiz, vicepresidenta de Asuntos académicos y Provost de la USC “Lo venimos haciendo sistemáticamente hace muchos años, pero de forma reciente el año pasado cuando firmamos el ‘Manifiesto por un periodismo ético, diverso y veraz’, para el que reunimos a distintos medios de comunicación de toda la isla. Iniciamos esa firma con el propósito de decirle a la industria ‘vamos a reflexionar’. Esta charla magistral es otra instancia en la cual, casi un año después, nos reunimos para volver a detenernos, pausar y reflexionar, y hacer consideraciones críticas y éticas de la gestión periodística”, explica. Ramos está esperanzada con la recepción de los estudiantes a las propuestas que Grijelmo presentará esta semana. “El próximo lunes espero contar con estudiantes inspirados, que hayan ganado una perspectiva critica e internacional que les resulte refrescante y que tenga resonancia con lo que han estado aprendiendo en sus salones de clases. Espero también que nuestra facultad disfrute de un espacio de reflexión y de dialogo con un colega como es Álex Grijelmo y que estén inspirados para continuar con la excelente labor que realizan. Y también espero que el sector periodístico de Puerto Rico, el ecosistema de las comunicaciones en Puerto Rico reafirme que Sagrado está abierta y disponible para tender continuamente los puentes de diálogo y de recepción colaborativas. Sabemos que al final, aunque trabajemos de forma separada y todos estemos bajo distintas marcas y empresas, seguimos siendo parte del desarrollo económico, social y cultural de Puerto Rico. Espero que al cabo de esta semana eso se reafirme y que la oportunidad de la charla magistral nos siga uniendo más a la colaboración entre la academia y el sector”, declara. Promoción de la charla magistral de la Cátedra Ángel Ramos de la Universidad del Sagrado Corazón Ramos agregó que esta “es la primera cátedra que hacemos desde la universidad y es importante por el rigor académico que representa”. “Ha sido un proceso de planificación de casi un año. La Cátedra Ángel Ramos reafirma la figura de don Ángel Ramos, que ha sido absolutamente clave en todo el desarrollo del periodismo y la telecomunicación en Puerto Rico. Para nosotros eso es súper importante porque conectamos la Escuela de Comunicación Ferré Rangel, con todo lo que representa ese nombre, con la figura de don Ángel Ramos. Esa declaración para nosotros es importante y para nuestros estudiantes, así que estamos muy agradecidos con la Fundación Ángel Ramos por su continuo apoyo y esperamos que esta sea la primera de muchas otras cátedras”, señala Ramos. Fotos / Archivo / Suministradas
La sede del centro, los fondos para construirlo, y más que nada, su misión delineada junto a la comunidad que servirá en Villa Prades, ya están estipulados. La iniciativa de la Plataforma para Impacto Social está lista para crecer. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé Un niño que pertenece a Vimenti tuvo a su cargo la colocación de la primera piedra de este sueño comunitario que pronto verán hecho realidad. Paso a paso se construye un sueño. Lo sabe la Plataforma para Impacto Social (PSI, por sus siglas en inglés), organización que persigue eliminar la pobreza en Puerto Rico mediante inversiones estratégicas e iniciativas de apoyo, junto a sus hermanas Boys & Girls Clubs de Puerto Rico (BGCPR) y la escuela pública chárter, Vimenti. Las tres entidades sociales imaginaban hace años un centro multifuncional donde reunir sus servicios a las comunidades que sirven en Villa Prades y en el residencial Ernesto Ramos Antonini en San Juan, que además les permitiera ampliar la oferta. Hoy la idea no solo tiene nombre, “OASIS”, sino que además cuenta con una sede, la escuela en desuso Dr. Cesáreo Rosa Nieves, y los fondos para construirlo. El gobierno estatal anunció este mes que le otorgaba a la Plataforma para Impacto Social -con Eduardo Carrera como su principal oficial ejecutivo-, un préstamo de 15.2 millones de dólares en fondos del Programa de Subvención para el Desarrollo Comunitario para la Recuperación ante Desastres (CDBG-DR en inglés). Estos se unen a una asignación de 5 millones de dólares anuales que otorgará el gobierno municipal de San Juan y a otras propuestas con agencias gubernamentales estatales como Educación y Vivienda, entre otras. “Ver esta primera piedra ha sido como un sueño hecho realidad, ha sido un proceso largo y difícil. Las familias estaban súper emocionadas y llenas de alegría”. Bárbara Rivera Batista, directora ejecutiva de Vimenti Por otra parte, el Departamento de Comercio federal otorgó una asignación de 30 millones de dólares, luego de que OASIS fuera seleccionado como uno de los seis proyectos merecedores de los fondos entre 565 participantes. Al agregar la aportación del sector filantrópico, la inversión total para darle vida a OASIS ronda los 100 millones de dólares y Carrera la definió como “histórica” en el evento de inicio de obras. “OASIS es un proyecto que se viene soñando hace muchos años. Nace de la necesidad de la comunidad donde estamos localizados con el proyecto Vimenti y del sueño de hace diez años pensando en cómo traer mejores oportunidades de movilidad económica a la comunidad de Villa Prades”, explica Bárbara Rivera Batista, directora ejecutiva de Vimenti, escuela que desde el año 2018 utiliza el modelo de dos generaciones con el que educan tanto a los estudiantes como a sus padres. Cuando documentaron que el 97% de los niños que atienden vive bajo el nivel de pobreza, se cuestionaron qué oportunidades tenían sus familias para romper ese ciclo de carencias. “Con la comunidad se soñó cómo debería ser ese proceso de transformación para tener más oportunidades y se soñó un lugar donde tuvieran acceso a distintos servicios”, agrega Rivera. OASIS tiene dos componentes clave: el centro multifuncional y sus iniciativas de desarrollo. El centro debe inaugurar en el año 2026 y acogerá a la escuela Vimenti, la cual podrá duplicar su matrícula, y los servicios socioemocionales que ofrece BGCPR. Las iniciativas para que las familias se fortalezcan comienzan entre noviembre 2024 y el 2025, y deben impactar a más de 300 personas al año. Contarán con cursos de capacitación laboral, la incubadora de negocios Project Makers y la expansión de un cuido de niños y ancianos, entre otras. Recibirán el respaldo del programa federal Recompete, de la Administración de Desarrollo Económico, y se acordó medir su impacto de aquí a cinco años. En la clínica Vidalus contemplan brindar servicios primarios de salud a unas 4,000 familias. La directora ejecutiva de Vimenti, Bárbara Rivera Batista frente a la estructura de la escuela abandonada que servirá de base a la construcción del nuevo centro. “Esa es la parte más hermosa de todo el trabajo”, acepta Rivera, “tuve la oportunidad de ser parte de ese grupo de líderes que trabajó la concepción programática. Ver esta primera piedra ha sido como un sueño hecho realidad, ha sido un proceso largo y difícil. Las familias estaban súper emocionadas y llenas de alegría de saber que, finalmente, lo que un día pensaron se está haciendo realidad, no solamente con el servicio si no con un espacio que ellos lo ven como el lugar que les asegura el crecimiento y la continuidad”. Alma Frontera, presidenta de Boys & Girls Clubs de Puerto Rico, está esperanzada en que “OASIS sirva como un ejemplo inspirador de cómo el apoyo multisectorial puede elevar la grandeza y el potencial de nuestras comunidades”. “OASIS está diseñado para empoderar a personas y a familias, para proporcionar apoyo desde la niñez temprana y, de forma sostenida, abrir caminos para primeras, segundas oportunidades y ofrecer posibilidades infinitas. Será un primer gran paso para crear un efecto dominó de cambio positivo en todo Puerto Rico”, propone Frontera. POBRE, ¿PORQUE QUIERE? No es un secreto que algunos ciudadanos piensan que las personas prefieren los ciclos de pobreza en los que viven porque les garantiza ayudas gubernamentales. Las tres organizaciones que respaldan el nacimiento de OASIS han trabajado con las familias a las que servirá el proyecto y conocen sus circunstancias. Figuras prominentes del gobierno y del tercer sector dijeron presente en la ceremonia de lanzamiento. “Primero debemos analizar cómo las familias que viven bajo los niveles de pobreza tienen que atender unos retos todos los días que nadie decide por sí mismo hacerlo. Nadie quisiera estar todos los días contando el dinero que tiene en el bolsillo para llevarle comida a sus hijos. Nadie quisiera que sus hijos estuvieran en una escuela que no suple sus necesidades físicas, emocionales y cognitivas. Nadie quisiera tener a un anciano en su casa sin los medicamentos correctos para que pueda tener calidad de vida. Esas son circunstancias que les han tocado vivir a cientos de miles de familias en Puerto Rico de las cuales muchas están en nuestras comunidades y están todos los días tratado de sobrevivir a unas circunstancias que no dependen de ellos, sino de situaciones que han pasado durante muchas generaciones”, indica Shaina Cabán Cortés, especialista en comunicaciones y coordinadora de relaciones de la Plataforma para Impacto Social. “Más que juzgarlos, deberíamos comenzar a ver lo que tenemos a nuestro alrededor como privilegios que debemos compartir para que otras personas tengan las mismas oportunidades. Este ejercicio de diseñar los programas de expansión de OASIS no son una ayuda que nosotros le damos a la comunidad, nosotros crecemos con ella, diseñamos con ellos para que nos enseñen cuáles son las soluciones para atender las necesidades que tienen todos los días”, agrega Cabán. La Plataforma para Impacto Social aspira a que el esfuerzo “sea replicable”, desde el entendimiento de que el modelo está diseñado a la medida de la comunidad y “no va a ser estático”. “Esto debe adaptarse a lo que seguirán siendo las necesidades de la comunidad y el trabajo se va a seguir haciendo con ellos”, culmina Cabán. Para saber más sobre OASIS y sus ofrecimientos, visita https://impactpr.co. Fotos / Suministradas / PSI
El programa vocacional de la organización Nuestra Escuela permitirá a 18 jóvenes loiceños capacitarse en la industria hotelera y turística de forma gratuita. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé Ana Yris Guzmán junto al grupo de jóvenes que se formarán en la nueva escuela celebran otro sueño más alcanzado por la organización. Cuando te fijas en la estructura ubicada a pasos del mar en el barrio medianía Alta en Loíza, lo menos que piensas es que se trata de una escuela. Pero lo es. Se llama Nuestra Posada y es el aula donde alumnos loicenos de la organización Nuestra Escuela aprenderán distintos oficios vinculados a la industria hotelera y turística del país. La acogedora residencia brinda una fiel representación de un hotel para que 18 alumnos puedan capacitarse, libre de costo, y obtener una certificación. El proyecto educativo ubica en cuatro cuerdas de terreno adquiridos por Nuestra Escuela con una inversión de $900,000 de diversas fuentes gubernamentales. “Celebramos la apertura no solamente de un espacio físico, sino la apertura de oportunidades para nuestros jóvenes”. Ana Yris GuzmánCofundadora y presidenta ejecutiva de Nuestra Escuela “Me honra muchísimo estar frente a ustedes en la tarde de hoy. Es una celebración que nos trae con nuevos bríos y con mucha esperanza el hecho de que podamos inaugurar un espacio que lleva por nombre Nuestra Posada. Celebramos la apertura no solamente de un espacio físico, sino la apertura de oportunidades para nuestros jóvenes”, indicó Ana Yris Guzmán, cofundadora de Nuestra Escuela y presidenta ejecutiva, durante la inauguración realizada a finales de septiembre. Al describir a Nuestra Posada dijo que es “un proyecto lleno de esperanza que sin duda será un catalizador de cambios positivos”. “Gracias por ser parte de esta jornada, sigamos adelante con la certeza de que lo mejor está por venir”, agregó ante la mirada atenta de representantes del gobierno municipal y estatal, del sector privado, filantrópico, así como de estudiantes. El enfoque en la industria del turismo responde no sólo al interés de los jóvenes sino a la realidad económica de la zona del noreste. Al ritmo de los tambores del Junte Loiceño, fueron recibidos los visitantes que recorrieron cada estancia de Nuestra Posada, caracterizada por sus espacios luminosos y acoogedores. Con planteles en Caguas y en Loíza donde ofrecen educación alternativa, Nuestra Escuela presenta este programa educativo en el que, al cabo de tres semestres, los alumnos deben completar 135 horas educativas para obtener su certificación vocacional. “Hotelería alineada con las culturas”, “Servicio al huésped” o “Promoción turística” son algunos de los cursos requeridos. La residencia en la que se ha establecido Nuestra Posada asemeja un hotel para que los alumnos puedan practicar, capacitarse y obtener sus certificaciones. La presidenta ejecutiva de Nuestra Escuela adelantó que aspiran a que el espacio se convierta en un hotel boutique donde se pueda desarrollar lo que llamó “turismo filantrópico”. La corriente vocacional de Nuestra Escuela añade Nuestra Posada a proyectos como Nuestra Moda, especializada en diseño de moda, y Nuestra Tierra, escuela vocacional de agricultura, ambas ubicadas en Caguas. En agenda está la escuela vocacional de tecnología. Fotos / Suministradas / Nuestra Escuela
La complejidad administrativa aumenta en este proyecto que maneja la organización Plataforma para Impacto Social, ya que aprovecha fondos federales, estatales, municipales y de socios filantrópicos en una inversión que ronda los 100 millones de dólares. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé Uno de los momentos más emotivos de la ceremonia de colocación de la primera piedra y lanzamiento de Oasis fue la entrada de la comunidad al espacio que verán muy pronto transformarse. El establecimiento del proyecto OASIS se perfila como una de las iniciativas más ambiciosas en el tercer sector local para cerrar la brecha entre el capital y los proyectos de impacto. La propuesta de la Plataforma para Impacto Social (PSI, por sus siglas en inglés), -organización hermana de Boys & Girls Clubs de Puerto Rico (BGCPR) y Vimenti School-, busca erradicar las causas de la pobreza y promover la movilidad económica mediante iniciativas integradas entre familias de comunidades en Villa Prades y el residencial Ernesto Ramos Antonini en San Juan. Con una inversión de 43 millones de dólares, OASIS se construirá en la escuela en desuso Dr. Cesáreo Rosa Nieves en San Juan y no solo albergará la escuela Vimenti, que al momento ubica en el Residencial Ernesto Ramos Antonini, sino que además será un Centro Multifuncional en el que se desarrollarán varios proyectos como incubadoras de negocios, capacitación profesional para adultos o servicios primarios de salud. No solo el cambio sistémico que propone es abarcador, también lo es el manejo en colaboración entre BGCPR, Vimenti y PSI de las diversas fuentes de fondos. Este mes de septiembre, el gobierno estatal anunció que le otorgó a la Plataforma de Impacto Social un préstamo de 15.2 millones de dólares en fondos del Programa de Subvención para el Desarrollo Comunitario para la Recuperación ante Desastres (CDBG-DR en inglés) para darle vida a OASIS. El Municipio de San Juan prometió destinar 5 millones de dólares anuales. De otra parte, el Departamento de Comercio federal asignó 30 millones de dólares como parte de un programa que beneficiará a comunidades de la capital y que seleccionó seis proyectos entre 565 propuestas. En el renglón filantrópico ya se han unido a la causa las entidades locales e internacionales: Fundación Banco Popular, Flamboyán Foundation, Colibrí, I Am the Vine, Peter Alfond Foundation y Michael Tennenbaum, entre otras. “Hemos trabajado en un esfuerzo titánico, de la mano con los socios que han hecho esto posible. Trabajamos desde la visión de que, para que haya un cambio sistémico, tiene que haber un movimiento de capital gigante que en Puerto Rico nunca se había visto. Para lograrlo trabajamos con un modelo de financiamiento combinado. Diseñamos el proyecto y las propuestas con las organizaciones que van a estar llevando a cabo los programas en la comunidad y así pudimos identificar también organizaciones financieras o bancos privados en Estados Unidos y oportunidades de propuestas en el gobierno central que se alineaban al trabajo que nosotros íbamos a hacer”, explica Shaina Cabán Cortés, especialista en comunicaciones y coordinadora de relaciones de la organización Plataforma para Impacto social. Cabán indica que desde el gobierno central lograron asegurar “una inversión por fondos de recuperación, por programas del Departamento de Educación y del Departamento de Vivienda para desarrollo social”. “Lo que hicimos fue alinearlos al trabajo de la propuesta”, explicó. “OASIS nos asegurará un espacio donde crecer. La meta final es asegurar oportunidades de movilidad económica, seguir reduciendo la cantidad de familias que viven bajo el nivel de pobreza y creando oportunidades de empleo para las familias que más lo necesitan”. Bárbara Rivera, directora de Vimenti Igual hicieron con los fondos del programa federal Distressed Recompete, de la Administración de Desarrollo Económico, que busca eliminar barreras de movilidad social en las comunidades con un proyecto piloto que está bajo su lupa. “Ellos querían ver a través de este proyecto piloto si invertían una cantidad grande de capital, lograban movilidad económica, si se removían las barreras para que las familias pudieran prosperar. Literalmente eso era lo que nosotros veníamos haciendo, así que pudimos alinear el trabajo de la construcción del edificio de OASIS, con el desarrollo y la expansión de programas y fuimos identificando lo que hacía falta para poder compaginar todo el trabajo que se necesitaba. Esta labor no es solo de la Plataforma para Impacto Social, se ha hecho de la mano con otras organizaciones como Vimenti, la clínica de salud Vidalus, Project Makers, que se enfocan en el desarrollo empresarial, el Instituto del Desarrollo de la Juventud y Jobs for a Future, que en Estados Unidos trabajan para mejorar la cultura laboral en las comunidades y este es el primer proyecto que tienen en Puerto Rico”, expone Cabán. La coordinadora agrega que en el proceso de identificar qué necesitaban y cómo reforzar la labor que ya hacían, lograron “que los socios financieros se unieran desde adentro y pudimos alinear todos los esfuerzos”. “Es un trabajo que se había hecho durante muchos años juntos, así que no era lejos de lo que veníamos trabajando”, opina Cabán. A BUENA HORA OASIS llegó en un momento de madurez administrativa y programática para las tres organizaciones involucradas en su creación y desarrollo. Alma Frontera, presidenta de Boys & Girls Clubs de Puerto Rico, asegura que OASIS “representa el sueño cumplido de generaciones de familias que recibieron servicios en nuestro primer Club, en la comunidad de Ernesto Ramos Antonini”. “Junto a ellas aprendimos y entendimos mejor el tema de la pobreza y, a la vez, reafirmamos el potencial y la fuerza de voluntad que existen en nuestras comunidades para construir un gran futuro”, señala Frontera. El entusiasmo de los niños y niñas en el evento fue evidente ya que, en todo momento, fueron parte del proceso. La líder repasa que las lecciones recibidas los llevaron a crear hace 11 años el Instituto del Desarrollo de la Juventud “para promover la investigación y políticas públicas dirigidas a fortalecer la seguridad económica de nuestras familias”. “Siete años después, lanzamos Vimenti como un modelo de servicio de dos generaciones para proveer oportunidades de desarrollo social y de movilidad económica tanto a niños, jóvenes y adultos, como a sus familias. Y hace dos años comenzamos a administrar centros de Head Start y Early Head Start para ampliar nuestro apoyo a las familias de bajos ingresos. OASIS representa la culminación de años de aprendizaje, comunicación, relación y comunicación con distintos sectores, con nuestras comunidades y familias en el centro, para mitigar la pobreza, transformar el país y lograr resultados sostenibles”, puntualiza Frontera. Por su parte Bárbara Rivera, directora de Vimenti, señala que “las organizaciones se fueron preparando” en términos de identificar la estructura de gobernanza interna para manejar un sistema combinado de fondos estatales y federales. “En Vimenti llevamos más de cuatro años bajo un modelo de alineamiento de valores organizacionales dirigido a lo que llamamos la gobernanza ética y transparencia. Todos hemos pasado un proceso de madurez para evolucionar, siempre enfocados en que las organizaciones se manejen con una gobernanza transparente, que mantengan los procesos éticos y que nos fortalezcamos a nivel estructural internamente para poder manejar un tipo de proyecto como este. Ese fortalecimiento se ha dado con el tiempo”, declara Rivera. Para el equipo, los resultados son importantes por lo que han destinado una estructura que proporcione datos y pueda medir el impacto alcanzado. “OASIS nos asegurará un espacio donde crecer. La meta final es asegurar oportunidades de movilidad económica, seguir reduciendo la cantidad de familias que viven bajo el nivel de pobreza y creando oportunidades de empleo para las familias que más lo necesitan. Tenemos que creer en la capacidad de transformar; cuando el sueño salga de ellos, es posible y podemos brindar esperanza a otras comunidades de que se puede generar un cambio y que existe el acceso a nuevas oportunidades para todos”, culmina Rivera. Fotos / Suministradas / PSI