A partir de mañana sábado, el museo santurcino recibirá visitantes mediante reservaciones previas para garantizar la seguridad durante la pandemia. Por Redacción Oenegé El Museo de Arte Contemporáneo de Puerto Rico (MAC) reabre sus puertas al público mañana sábado, 5 de septiembre, en horario de 11:00 a.m. hasta las 5:00 p.m. El reencuentro en las galerías del museo se concreta con las garantías sanitarias requeridas en estos tiempos de cuidado y prevención tanto para el público como para los trabajadores de la institución. La reapertura ha sido planificada con la presentación de la muestra Educación sentimental: pintura reciente de la artista puertorriqueña Bárbara Díaz Tapia. La exhibición da continuidad a uno de los ejes temáticos con los que el museo viene trabajando de forma consistente: el reconocimiento de las visiones feministas de artistas que aportan al desarrollo del arte en Puerto Rico. Nacida en Bayamón, Díaz obtuvo un Bachillerato en Imagen y Diseño de la Escuela de Artes Plásticas del Instituto de Cultura Puertorriqueña y una Maestría en Artes en 2017 de la Pennsylvania Academy of the Fine Arts en Filadelfia. Se desempeña como pintora, dibujante, foto y video artista, así como diseñadora gráfica. La reservación para la entrada al MAC puede tramitarla con antelación de modo electrónico o por teléfono al 787-977-4030. Foto / Suministrada Si bien durante la pandemia el MAC ha mantenido activos sus programas educativos, servicios para maestros, exhibiciones virtuales, conciertos y el Fondo de Emergencia para Artistas Contemporáneos, entre otras iniciativas, retomar la actividad presencial sigue siendo un compromiso importante en la lucha por recuperar los espacios y ambientes culturales que tanto bien generan en la humanidad. Es precisamente con esta voluntad social de intercambio, conversación y debate que el MAC retoma su actividad presencial con Educación sentimental, exhibición en la que Díaz Tapia elabora un singular ejemplo de la pintura como espacio para el diálogo político y social, al abordar el tema de la maternidad desde un espacio incómodo y espinoso. Según el curador invitado de la muestra, Nelson Rivera, la artista hace un robusto aporte a nuestra tradición puertorriqueña de la pintura como provocación al presentar un duro retrato de nuestra sociedad a través de polémicas estampas de la figura materna. Las imágenes creadas por Díaz Tapia son estampas de hechos históricos, testimonios de datos fidedignos y nacen de su coraje cuando percibe el abandono de la niñez. Es pintura realista que sin anestesia nos confronta con la realidad puertorriqueña, “descarnada, violenta, abusiva”. “El retomar la actividad cultural del MAC desde nuestra sede nos llena de ilusión por la pertinencia del programa de exhibiciones y educación que hemos desarrollado para estos próximos años y la puesta en práctica de nuevas modalidades de hacer que hemos concebido a lo largo de este período. Reconocemos que el aspecto híbrido entre las plataformas digitales y la presencial serán vías que continuaremos aprovechando al máximo con la finalidad de mantenernos vinculados a la diversidad de públicos que el Museo sirve, incluyendo audiencias internacionales que han crecido notablemente durante este período”, declara Marianne Ramírez Aponte, directora ejecutiva y curadora en jefe del MAC. La reapertura del museo santurcino también coincide con el estreno de una nueva identidad gráfica de la institución, en la que se destaca el diseño ágil y de gran calidad estética concebido por su División de Diseño. Los diseñadores Luis A. Vázquez O’Neill e Ingrid Bonetti Veloz, en colaboración con el equipo directivo del MAC, estarán a cargo de la implementación de la nueva imagen. Este proyecto incluye una activación digital de la marca, desarrollo de estrategias para la creación de contenido y un completo rediseño de la página web de la institución. La División de Diseño se ha destacado a través de los años por su labor gráfica dentro de espacios y proyectos culturales dentro y fuera de Puerto Rico. NUEVOS HORARIOS Y REGLAS Comenzando el 5 de septiembre, el nuevo horario de visitas a las galerías del MAC es de jueves a sábado de 11:00 de la mañana a 5:00 de la tarde. La reservación para la entrada al MAC este próximo sábado puede tramitarla con antelación de modo electrónico o por teléfono al 787-977-4030 y se recomienda e invita al público a que haga uso de la aplicación a ATH Móvil para efectuar sus pagos (/MuseoMACPR bajo Negocios). Otros métodos de pago también podrán utilizarse en la Tienda MAC, que estará operando con las debidas medidas de seguridad. El donativo de entrada será de tres ($3) dólares hasta el 16 de octubre de 2020. Revisa el programa de actividades educativas paralelas a la exhibición Educación sentimental: sábados, 5 y 19 de septiembre / 11:00am, 1:00pm y 3:00pm – recorridos guiados con la artista Bárbara Díaz Tapia (se requiere reservación, cupo máximo de 15 personas por recorrido) miércoles, 30 de septiembre / 6:00pm - Charla con la artista Bárbara Díaz Tapia (vía Zoom) miércoles, 28 de octubre / 6:00pm - Conversatorio Arte, Maternidad y Derecho con la participación de las artistas Migdalia Barens Vera, Jomary Ramírez Segarra, la activista Michel Collado Toro y la abogada y profesora Patricia Otón, ambas expertas en derechos sexuales y reproductivos. El panel será moderado por la doctora Emilia Quiñones Otal, historiadora del arte. Foto Suministrada
Dónde y cómo nos necesitan nuestras comunidades son algunas de las preguntas que debes contestarte en la situación atípica que vivimos, la cual parece que se extenderá por más tiempo. Alfredo Carrasquillo, experto en desarrollo organizacional, te orienta. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé La pandemia sigue despojándole hojas a nuestro calendario. Tiempos inciertos precisan del liderato y la rapidez del tercer sector y, aunque esa ha sido la norma durante pasados eventos catastróficos vividos en el país y en medio de la crisis económica, un nuevo modo de proceder se impone en la era del COVID-19. La falta de precisión en torno al fin de esta emergencia sanitaria nos exige a todos un cambio de ruta. Eso incluye a las organizaciones sin fines de lucro. Con Alfredo Carrasquillo, consultor en desarrollo organizacional y coach ejecutivo, conversamos sobre las cosas que debes evitar, pero más que nada, las que debes poner en práctica ya para mantener viva la conexión efectiva con tus empleados y participantes. “Dos cosas serían las peores para hacer ahora: jugar al avestruz y meter la cabeza debajo de la tierra pensando que no pasa nada o que no hay que hacer ajustes ante esta realidad, y pensar que lo que vivimos es un asunto transitorio que ya mismo se va a acabar”, comienza alertando Carrasquillo. La información científica y médica pronostica que, al comienzo del año 2021, todavía la pandemia será un asunto prioritario en nuestras vidas. El desarrollo y la confirmación de la efectividad de las nuevas vacunas toma tiempo y la posibilidad de recurrencia ante la enfermedad comienza a documentarse. “Aunque se nos haga difícil, hay que reconocer que es una nueva realidad que llegó para quedarse más tiempo del que quisiéramos y que obliga a repensar las prácticas de nuestras organizaciones sin fines de lucro”, añade el mentor. Repasemos juntos algunos aspectos que, según alerta nuestro entrevistado, llegaron para quedarse en tiempos pandémicos: Trabajo remoto- Lejos de ser un remedio temporero, esta práctica laboral estará con nosotros más tiempo para garantizar la salud de todos. Medidas para promover servicios tienen que considerar variables de modo prolongado- Cómo se dan los servicios, reorganizar los espacios dependiendo de la naturaleza de la organización y la prioridad inmensa que debe tener el desarrollo de habilidades tecnológicas de empleados y participantes, escalaron en el orden de tus prioridades. Procurar la conexión con todo el universo que sirves y del que te nutres- Cerrar la brecha digital en la isla también se añade a tus tareas. “Tenemos que trabajar duro para que la conectividad de todos los ciudadanos sea mejor. No puede ser que cinco personas en una familia dependan de la misma computadora, porque no es factible en esta realidad de trabajo y estudio a distancia. Las organizaciones sin fines de lucro deberán encaminar esfuerzos para que cada niño y adulto obtenga el equipo necesario porque esa será la vía para recibir los servicios y deben brindar también la educación para aprender a manejarlos”, subraya. Ponte las pilas con tu equipo- Asegúrate que tus empleados están bien, más allá de permitirles que se lleven a las casas las computadoras portátiles y las sillas ergonómicas que usaban en la sede de la organización. “Además de consideraciones legales y de salubridad, hay unas responsabilidades éticas que cumplir”, dice el mentor. Que no escapen de tu vista quienes no pueden hacer trabajo remoto- Esta situación no es similar a un post huracán en la que tarde o temprano llegará la electricidad, el agua o el internet. “Enfrentamos un escenario del cual todavía desconocemos la magnitud de su impacto económico en nuestras finanzas personales, en la isla y en el mundo. Las condiciones de vida se agravarán en varios segmentos de nuestra población. El que está en la economía informal o trabaja en la calle está más expuesto a enfermarse. ¿Cómo vamos a responderle a estas personas? ¿Quién los va a cuidar?”, cuestionó. IMPLANTAR LO APRENDIDO Alfredo Carrasquillo Además de empeño, si algo tiene de sobra el tercer sector es conocimiento de las poblaciones que atiende y ahora debe depurarlo. Carrasquillo exhorta a aprender de las experiencias vividas. “El huracán María nos dio una gran lección de humildad. Muchas organizaciones sin fines de lucro habían perdido el contacto con la realidad de sus comunidades y responder a la emergencia los confrontó con una pobreza y una necesidad más básica, y con sectores de población que no atendían y estaban en precariedad. Hay que aprender de eso y no cometer el mismo error”, dice el coach ejecutivo sobre la enajenación por exceso de trabajo. Estar alertas significa también disponer de un inventario de necesidades específicas. “Hay que aprovechar el equipo de trabajo y los voluntarios para hacer mucha investigación de mercado y con eso me refiero a encuestas y entrevistas para saber qué está pasando con nuestra gente, cuántos desempleados hay, de qué están viviendo. La realidad de hoy es distinta y mañana será diferente”, asegura. Una de esas realidades que ha experimentado los cambios más dramáticos es la red de apoyo de familias y trabajadores. Los abuelos, que solían cuidar los niños, integran los grupos vulnerables al nuevo coronavirus, mientras que los niños pertenecen a un segmento, por lo general asintomático y con altas probabilidades de contagiar a otros. “Para mucha gente es posible que su red de apoyo no este ahí después de esta experiencia, por la cantidad de muertes que se vislumbran ¿Cómo vamos a responderle a esos adultos que se quedan solos? Son preguntas duras, pero hay que hacerlas porque la realidad no nos puede agarrar con los calzones abajo”, sostiene. De igual manera, las fundaciones vienen obligadas también ha replantearse “dónde y en qué van a hacer inversión social en medio de la pandemia”. “No pueden seguir pensando en business as usual, sino en dónde poner los apoyos, en construir apoyos con más gente y mediante esfuerzos más arriesgados”, insiste Carrasquillo e invita a revisar los proyectos que han abrazado las fundaciones Ford y Rockefeller en la pandemia. Las posibilidades existen, solo debemos cambiar de espejuelos para verlas. No te olvides: Hacer una radiografía para tener un diagnóstico claro de dónde están y las circunstancias de vida de la gente que servimos y de quienes trabajan con nosotros Repensar el modelo de servicios y las prioridades de tu organización ante la prolongación inevitable de la crisis Ejecutar partiendo de la nueva información Fuente: Alfredo Carrasquillo Fotos: Javier del Valle
Más de 50 estudiantes aprovecharán durante su educación a distancia este proyecto de la Red por los Derechos de la Niñez y la Juventud inaugurado en Juncos. Por Redacción de Oenegé Marcos Santa Andújar, director de la Red por los Derechos de la Niñez y la Juventud. Foto Suministrada / Juan Luis Martínez Con el propósito de romper la brecha tecnológica para la educación a distancia que tienen niños y jóvenes de escasos recursos, se inauguró un Centro de acceso a la tecnología en Casa Ramón, centro comunitario de servicios que atiende a esta población en Juncos. Este proyecto de la Red por los Derechos de la Niñez y la Juventud proveerá internet de banda ancha y recursos educativos a unos 50 estudiantes del barrio Las Piñas, en dicho municipio. “Con el cierre de escuelas por el Covid-19, vimos que se estaba afectando la educación de muchos niños, lo que añadía ansiedad a los padres y las madres. Un 75% de las familias de niños en escuelas públicas viven bajo el nivel de pobreza. La educación a distancia es un problema para ellos porque un 44% de estos hogares no tienen acceso a internet y en 35% no hay computadoras, de acuerdo a cifras del censo. Este centro en Casa Ramón les va a brindar alternativas educativas a los niños de la comunidad”, explicó Marcos Santana Andújar, director ejecutivo de la Red por los Derechos de la Niñez y la Juventud de Puerto Rico (REDENIJ-PR) cuya sede está en Casa Ramón. Participante recibe orientación sobre el uso de una tableta. Foto Suministrada / Juan Luis Martínez Bautizado Sala Educativa Las Negras, el centro contará con internet de banda ancha, equipos tecnológicos como computadoras de escritorio, tabletas portátiles, laptops, además de un área de lectura con libros de escritores puertorriqueños. También se les proveerá a los participantes una caja con materiales de arte para promover proyectos recreativos y educativos en el hogar. Los estudiantes que acudan podrán llevar almuerzo caliente para ellos y sus familias. Los alumnos podrán acudir en turnos a lo largo de una jornada de 8:00 a.m. a 3:30 p.m. para poder guardar el distanciamiento y las medidas de seguridad de prevención dirigidas a evitar el contagio de Covid-19. En el lugar habrá supervisión y servicios de un equipo de trabajadores sociales, maestras, psicólogos, una enfermera y una facilitadora de servicios, además de los voluntarios de la comunidad. La iniciativa educativa se logra con el apoyo de la Fundación Segarra Boerman e Hijos Inc., que respaldó Casa Ramón desde un inicio, la Fundación Ángel Ramos, Hispanic Federation, Fundación Banco Popular, Fundación Flamboyán y Fundación Comunitaria. “Estas instituciones han permitido que podamos cerrar aquí la brecha digital para niños de escasos recursos, tras la poca agilidad del Departamento de Educación para solucionar este problema”, comentó el director de REDENIJ-PR, quien anticipó que se propone abrir en el futuro un centro similar en el área sur. “En mi casa son cuatro hijos y una sola laptop que hay que estarse dividiendo”. Santana Andújar explicó que el nombre de la sala educativa Las Negras lo decidió la comunidad para apoyar el movimiento antirracista “Las vidas negras importan”. Se le dedica la sala a cinco mujeres negras que han aportado a la educación y apoderamiento de las niñas y niños negros: la líder comunitaria Ivelisse Esquilín, la escritora Mayra Santos Febres, la profesora Yolanda Arroyo Pizarro, Gloriann Sacha Antonetty, de la revista Étnica y Elizabeth Andújar, neurocoach de mujeres y niñas. Ivelisse Esquilín, líder comunitaria del Barrio Piñas, sector La Hormiga en Juncos, compartió cuán importante era este nuevo centro para la comunidad. “Aquí había un vacío muy grande. Esta es una comunidad marginada que lleva años tratando de superarse. Tenemos unos niños y jóvenes que hasta en el deporte sobresalen. Muchas veces los limitan y discriminan porque viven aquí. La educación es bien importante. Aquí muchos niños carecen de internet, no tienen computadoras, para mí fue triste ver a los nenes que entraban a clases por medio de su celular. En mi casa son cuatro hijos y una sola laptop que hay que estarse dividiendo. Ahora con Casa Ramón, muchos de nuestros niños y jóvenes van a tener un lugar donde hacer sus trabajos escolares”, expresó Esquilín. La Red por los Derechos de la Niñez y la Juventud de Puerto Rico es una organización sin fines de lucro enfocada en transformar las condiciones de vida de la niñez y familias en contextos de violencia. “Como organización, parte de nuestra misión es acompañar a los niños y jóvenes en momentos de emergencia. Durante esta pandemia hemos tenido varias iniciativas y estrategias en respuesta a la seguridad alimentaria, apoyo emocional con psicólogos y trabajadores sociales, vivienda para jóvenes sin hogar. También hemos tenido programas de entrega de 30,000 libras de comida en Juncos, que es nuestro centro de operaciones, y en 17 municipios más, y repartición de 15,000 platos de almuerzos calientes para las familias. Ahora los apoyamos en su educación”, culminó Santana Andújar. Foto Suministrada / Juan Luis Martínez
La Ley 123 de este 2020 atiende la fragilidad de alumnos en instituciones postsecundarias que provienen de los sistemas de albergues del Departamento de la Familia. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé Marcos Santana Andújar, director de la Red por los Derechos de la Niñez y la Juventud. Foto Suministrada / Juan Luis Martínez El cumpleaños número 18 de muchos jóvenes en la isla marca su partida de los albergues del Departamento de la Familia donde se criaron. Aunque logren ingresar a una institución postsecundaria para cumplir sus metas educativas, muchos quedan a la deriva en situaciones como la pandemia actual al cerrarse los hospedajes universitarios. Es entonces cuando algún vehículo o el sofá en casa de distintos compañeros se convierte en su único hogar. ¿Cómo ayudarlos? La Red por los Derechos de la Niñez y la Juventud comenzó ha insertar este tema en la discusión pública desde el 2017. Tras el paso del huracán María, vieron cómo jóvenes que habían salido de los albergues del Estado comenzaron a regresar a ellos durante la emergencia. Se dieron entonces a la tarea de documentar la población sin hogar entre 18 y 24 años, de visitar proyectos exitosos en otros países y presentaron una propuesta dirigida a la creación de una ley que establezca incentivos educativos y de apoyo a estos jóvenes que estuvieron bajo la tutela del Estado en hogares de crianza, en una institución juvenil o un centro de detención. Así surgió la Ley 123 del 15 de agosto de 2020, aprobada por la gobernadora Wanda Vázquez, o la “Ley de Incentivos para Estudiantes en Instituciones Postsecundarias que provienen de Hogares Temporeros o de Hogares de Grupo”. “Los jóvenes que se quedan en la calle necesitan oportunidades”, dice Marcos Santana Andújar, director ejecutivo de la Red. “Y para eso hace falta crear un sistema específico que atienda a estos jóvenes en la calle. Un sistema de oportunidades para que después de los 18 encuentren servicios, alimentos, vivienda y orientación en sus asuntos de salud. Nosotros creemos que las organizaciones no forman niños y jóvenes saludables, creemos que las relaciones forman jóvenes fuertes, así que más que transacciones, en las organizaciones sin fines de lucro tienen que darse relaciones y eso es lo que hace nuestro equipo”, añade. El estudio “Conteo de Personas sin Hogar 2017” destacó que los jóvenes entre los 18 y 24 que salieron de los albergues del Estado quedan desprovistos de ayudas y orientación, por lo que recurren al deambulismo. Los entrevistados en el estudio indicaron que en ocasiones personas le ofrecieron casa, comida o dinero a cambio de favores sexuales. De otra parte, el Departamento de Vivienda federal estima la población de jóvenes sin hogar en la isla en 484 personas. La nueva ley llegó justo a tiempo porque la pandemia volvió a alterar el curso de sus vidas. LA LÍNEA CALIENTE Cuando el COVID-19 paralizó la isla, los jóvenes que solo contaban con el hospedaje como hogar principal quedaron en la calle. Muchos comenzaron a llamar a la Red. Desde la ciudad universitaria de Río Piedras, la Red ha recibido llamadas de jóvenes sin hogar que buscan ayuda. Foto / Javier del Valle. “Mira, que me cerraron el hospedaje y yo no tengo familia porque me crié en el sistema” o “no puedo volver a mi casa porque mis papas son violentos conmigo por mi orientación sexual” fueron algunas de las explicaciones que ofrecían vía telefónica. Se recibieron más de 350 llamadas, según confirma Santana, aunque no todas reflejaban problemas de vivienda. “Las llamadas fueron para nosotros como una bandera; primero vino el problema y nosotros creamos el hotline para responder a ese problema. Nos llamaron de San Juan, Ponce, Mayagüez, de Gurabo, ciudades donde hay universidades o centros de estudios secundarios. Pero luego, por ejemplo, había jóvenes de 18 años durmiendo en carros en Lares, en Fajardo o en Humacao. Teníamos trabajo en varias vías”, agregó el líder. La tarea incluía visibilizar el tema, impulsar política pública y dar servicio al mismo tiempo. Santana advierte que el perfil de jóvenes sin hogar en Puerto Rico no es el mismo de adultos. “Son los egresados de los after school y de los servicios que damos buenísimos, pero cuando llegan a los 18 hay un gap de servicios y eso es lo que la Red quiere atender. Ellos no están debajo del puente de la 65 de Infantería, ellos hacen lo que llaman en Estados Unidos surfing de un sofá a otro”. Los sistemas de vivienda, federal y estatal, no están especializados en jóvenes y fallan en hacer un conteo efectivo de ellos, a juicio de Santana. Organizaciones sin fines de lucro que trabajaron con ellos saben que existen. “Por eso nosotros estamos dando el servicio a la vez que rescatamos esos datos”. “Para nosotros es un gran avance de nuestro proyecto de abogacía porque si las organizaciones sin fines de lucro no abogamos, nuestro trabajo no tiene sentido”. La Red se dedicó a aprender buenas prácticas de otros proyectos sin fines de lucro en el extranjero que sirven poblaciones similares como The Door, en Nueva York, o Casa María Amor, en Ecuador. Del primero imitaron la práctica de usar fondos para alquilar de forma temporera espacios en Airbnb para albergar los jóvenes que están en la calle en plena pandemia. Acondicionar un centro, particularmente en una vieja escuela, está en agenda. “Recibimos con alegría inmensa el proyecto que acaba de firmar la gobernadora porque es un proyecto que nosotros propusimos en el 2018 cuando publicamos nuestra guía para crear un fondo que aporte a los jóvenes en la calle, para que pudieran estudiar”, dice sobre la medida que presentó el presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz. “Para nosotros es un gran avance de nuestro proyecto de abogacía porque si las organizaciones sin fines de lucro no abogamos, nuestro trabajo no tiene sentido. Falta un montón por hacer, esto es apenas una curita, pero que se hable del tema es bien importante”, señaló. Cuando en agencias estatales y federales les preguntan cómo logran contacto con una población que puede ser bastante escurridiza, el director ejecutivo de la Red asegura que están presentes en las redes sociales que los jóvenes sin hogar utilizan, aprovechando celulares viejos e internet gratis en plazas públicas. “El equipo se ha preparado para este proyecto y este es solo el primer fruto porque seguimos trabajando”, anticipa Santana. Foto Suministrada / Juan Luis Martínez
Con la meta de que el año escolar que comienza contemple las múltiples posibilidades y necesidades de nuestros alumnos, nueve fundaciones del país unieron esfuerzos e información para crear un plan de trabajo integral que compartieron con el Departamento de Educación. Por Tatiana Pérez Rivera :: Oenegé El tipo de regreso a clases que tendrán los estudiantes de nuestro país en tiempos de pandemia nos debe importar a todos. Y ese amplio concepto de “todos” incluye al tercer sector. Por eso, las fundaciones Flamboyán, Titín, Segarra Boerman e hijos, Colibrí, Comunitaria, Banco Popular, Liberty, Puerto Rico Education y Filantropía Puerto Rico, entre otras, identificaron retos, evaluaron ideas y propuestas que han resultado efectivas para preparar la guía de recomendaciones Educación segura y accesible. La guía fue compartida con el Departamento de Educación, con las organizaciones sin fines de lucro que apoyan y con el público general en sus redes sociales. El documento, que reúne consideraciones para un plan integral de cara al reinicio de las clases en Puerto Rico, comenzó a gestarse el pasado mayo y en julio fue sometido a la secretaría de Educación. En su introducción, el documento destaca la cercanía de las organizaciones y las fundaciones con las comunidades de mayor necesidad y riesgo dentro del contexto de la pandemia, lo que ofrece una envidiable posición al “proveer perspectivas esenciales para informar y apoyar las decisiones sobre el reinicio de las clases para los estudiantes en la isla”. “Nuestros estudiantes han vivido crisis que han impactado su progreso académico durante los pasados tres años de manera significativa, pero en comunidad y colaboración podemos asegurarnos de que este año escolar cuente”, agregan en el encabezado del plan. Carlos Rodríguez Silvestre, director ejecutivo de Fundación Flamboyán, destaca que el plan integral incluye aspectos claves como proteger la salud y la seguridad de la comunidad, así como contemplar las necesidades académicas y socioemocionales de los estudiantes. Algunas consideraciones de inmediato estuvieron sobre la mesa en el junte entre fundaciones. “Tuvimos muchas recomendaciones en la implementación de medidas de seguridad por el virus, mucho consenso también en involucrar el insumo de las familias y los maestros. Ha quedado bastante claro que tanto en el sistema público como en el privado no ha habido una participación de esas familias y de los maestros en lo que podría ser o no ser esta experiencia virtual”, resalta Rodríguez. Como referencias al plan se incluyen estudios y webinars realizados por diversas organizaciones en plena pandemia para entender lo que vivimos y cómo puede enfrentarse. Pero, sobre todo, a juicio del director ejecutivo de Fundación Flamboyán, se incluyen “para elevar las voces no solamente de los maestros y de líderes escolares, sino también de las familias, para que entiendan ese contexto de las necesidades y la capacidad de poder atender esa educación virtual de los niños”. HAY QUE HABLAR CLARO Mucha importancia se le destina al renglón de “comunicación efectiva y transparente”. “A las familias les hace falta información. Hay que explicarles bien qué está haciendo el sistema para atender un posible regreso presencial a clases. Si no se cuenta con su insumo, si no hay una comunicación clara, no puede haber compromiso”, subraya Rodríguez. Además de las medidas de seguridad, el plan invita a atender a los estudiantes de manera holística, a cuidar su componente socioemocional y la seguridad alimentaria de ellos y sus familias. Entre muchas, una preocupación destaca: que el acceso a la educación pública sea equitativo. “Creo que hay una concepción errónea del trabajo que hacen las fundaciones en Puerto Rico y cómo pueden ayudar, en este caso, al Departamento de Educación. No podemos resolver su escasez de recursos y no queremos su dinero, lo que queremos es incidir con información en que el dinero sea mejor utilizado”. “El enfoque hasta ahora ha sido equipo tecnológico, conexión y capacitación para aprender a manejar la plataforma digital, pero poco se ha hablado de maneras efectivas de instruir a través de las plataformas y cómo atendemos los rezagos académicos que vienen arrastrando los estudiantes, exacerbados por los huracanes, por los terremotos, por el COVID-19 y por el cierre de escuelas que se dio también en el mismo periodo”, afirma. Algunas de las fundaciones coautoras del documento han participado en distintas reuniones en las que ha habido representación del Departamento de Educación y de la Junta de Supervisión Fiscal, y han invitado al gobierno a crear un Task Force Educativo multisectorial que apoye la gigantesca tarea que esta administración enfrenta, al igual que el resto del mundo. “Creo que hay una concepción errónea del trabajo que hacen las fundaciones en Puerto Rico y cómo pueden ayudar, en este caso, al Departamento de Educación. No podemos resolver su escasez de recursos y no queremos su dinero, lo que queremos es incidir con información en que el dinero sea mejor utilizado. Queremos apoyar, compartir lo que hacen las comunidades, por ejemplo, las escuelas alternativas, elevar esas voces y esas mejores prácticas de trabajo que conocemos por el trabajo que hacemos”, explica. El grupo continuará compartiendo la información que recopilan y tocando la puerta en el Departamento de Educación. Al momento, no ha habido reacción oficial de la agencia. “Esperamos seguir actualizando este documento vivo, pero también empujando que se escuchen más voces y que las decisiones sean mejor informadas”, culmina el director ejecutivo de Fundación Flamboyán. Fotos / Suministradas / Fundación Flamboyán